El plan se estima que moverá una cifra superior a los 20.000 millones de pesos en cuatro años, previendose que en la primera etapa se desarrollen obras de ampliación y reconstrucción de rutas, desagues, acueductos de agua potable y sistemas de defensa.

“Nosotros queremos sancionar el Programa Federal de Infraestructura lo antes posible, porque es una herramienta muy importnte para el país”, comentó el titular de la bancada alilancista, Darío Alessandro, al anticipar que la Alianza intentará acelerar la discusión de la iniciativa que es considerada “clave para lograr la reactivación de la construcción”.

El estudio del proyecto se iniciará a las 14.30 de hoy, con el informe que brindarán los ministros ante la Comisión de Obras Públicas que preside el radical José Recio. Los ministros debían concurrir en un principio durante la semana anterior, pero posteriormente se decidió que los titulares de las carteras expongan en la comisión donde están representadas todas las fuerzas políticas.

Este programa es para el Gobierno tan prioritario que desea colocarlo al tope de la agenda parlamentaria. De hecho, es una de las propuestas más importantes que se han presentado hasta el momento -sino la única- para tratar de reactivar el país, en este caso a través de la construcción, uno de los motores más importantes para el empleo.

Cabe recordar que el plan prevé una inversión superior a los 20 mil millones de pesos, al tiempo que crea un Fondo Fiduciario de Desarrollo de Infraestructura que apunta a otorgar un mecanismo de garantía especial de las obras que se pagarán cuando estén terminadas, en un plazo que va entre 10 y 20 años.