Legisladores y ministros del PJ acordaron estrategia
Los diputados y senadores justicialistas ratificaron ayer su voluntad de lograr que el Poder Ejecutivo revea los más de mil millones de pesos que pretende recortar del presupuesto 2001 en partidas que afectan directamente a las provincias.
Sin embargo, decidieron dar marcha atrás en su pretensión de incluir en el proyecto un bono para paliar las situación de los distritos más comprometidos financieramente, conocido como "Brady provincial".
Esta fue la conclusión a la que arribaron los legisladores justicialistas durante una reunión de casi dos horas que mantuvieron con los ministros de Economía de las provincias gobernadas por el justicialismo. De tal manera, el justicialismo ratificó los nueve puntos elaborados en las reuniones celebradas la semana pasada en Tucumán y La Rioja en cuanto a las modificaciones en el presupuesto que exige al gobierno nacional, que están relacionados con partidas destinadas a las provincias y a programas sociales.
Mientras tanto, los mandatarios de varias provincias justicialistas dieron un explícito respaldo al Gobierno luego de analizar la refinanciación de los pasivos del 2001 de esos distritos.
Los ministros de Economía de las provincias gobernadas por el justicialismo, a excepción de Santa Cruz, se reunieron durante más de dos horas con senadores y diputados que participan de la negociación por el presupuesto y acordaron refinar algunos aspectos del acuerdo logrado hace una semana en la provincia de Tucumán. Entre los asistentes a la reunión estuvieron los senadores José Luis Gioja (San Juan), Julio San Millán (Salta), Eduardo Bauza (Mendoza), Carlos Verna (La Pampa), Ricardo Branda (Formosa; y los diputados Humberto Roggero (Córdoba), Oscar Lamberto (Santa Fe), Eduardo Camaño (Buenos Aires) y Marcelo López Arias (Salta), entre otros.
Roggero, al defender a las provincias destacó que "seríamos irresponsables si pidiéramos más; porque en el presupuesto no se menciona ni crecimiento ni desarrollo, y sin embargo no decimos nada".
"Lo hacemos por la gobernabilidad. Estamos siendo demasiado sensatos, podríamos ser demagógicos y pedir planes sociales y más dinero para educación y salud", agregó.
En cuanto a los gobernadores justicialistas, varios concurrieron ayer a la sede de la Jefatura de Gabinete para reunirse con Chrystian Colombo, coincidieron en señalar que el presupuesto del año próximo tiene que ser sancionado por el Congreso "en tiempo y forma".
"Esto es un nuevo respaldo al Gobierno nacional. Un acuerdo entre la Nación y las provincias es lo que nos va a hacer salir a todos de esta difícil situación", aseguró el gobernador de Jujuy, Eduardo Fellner.
Por su parte, Colombo señaló que el Gobierno nacional "no tiene ninguna duda de que el presupuesto se va a aprobar para mostrar al país en el exterior como confiable".
Además de Fellner, estuvieron junto a Colombo en su despacho los gobernadores Gildo Insfrán (Formosa), Carlos Rovira (Misiones), Juan Carlos Romero (Salta), Julio Miranda (Tucumán) y Daniel Gallo, vicegobernador de Tierra del Fuego. Por parte del Gobierno, también participaron del encuentro el secretario general de la Presidencia, Horacio Jaunarena, y el subsecretario de Relaciones con la Provincias, Oscar Cetrángolo.
Los gobernadores justicialistas ratificaron ante Colombo su oposición a los recortes que prevé el gobierno para el presupuesto del año próximo, en especial para el Fondo del Tabaco, que beneficia a las provincias del norte, y los subsidios al combustible y al gas en la región patagónica.
0 Comments