El justicialismo se reunió en asamblea a sus gobernadores legisladores y dirigentes, donde respaldaron mediante un documento a Carlos Menem y poner en marcha una estrategia que demorará el tratamiento de proyectos enviados por el gobierno al Congreso.
El documento cuyo título “Para que no se politice la Justicia, ni se judicialice la política”, brinda una total solidaridad con el ex presidente Carlos Menem, resaltando además que el PJ seguirá garantizando la gobernabilidad, la estabilidad democrática y el funcionamiento de las instituciones, pero advierten que “no se puede quedar callado frente a lo que acontece en el orden judicial”.La asamblea se llevó a cabo en el Salón Azul del Congreso Nacional, donde más de 700 dirigentes partidarios brindaron su solidaridad con el ex presidente. Faltaron a la cita su archienemigo partidario Eduardo Duhalde y el gobernador de Santa Cruz, Néstor Kirchner.
Cabe destacar la rápida reacción de los operadores menemista, quienes lograron al PJ al considerar "un ataque contra el peronismo" el pedido del fiscal que consideró a Menem, titular del Consejo Nacional partidario, como "presunto jefe de una asociación ilícita" que exportó ilegalmente armas.
Pronto logró uno de sus primeros objetivos al obligar a la suspensión de las sesiones en el Congreso por al menos una semana.
Aunque el subloque de 40 diputados menemistas impulsaba que el documento que emita hoy la asamblea de dirigentes peronistas fuera "muy duro" con el gobierno y con Stornelli, primó el peso de los no menemistas y el documento será redactado por los propios gobernadores y legisladores.
Los ultramenemistas también solicitaron la obstrucción de todas las iniciativas gubernamentales que corran por la vía parlamentaria, dijeron fuentes legislativas.
Pero el "equilibrio" defendido por los titulares de los bloques de las dos Cámaras, el diputado Humberto Roggero y el senador José Luis Gioja, derivó en que se postergara hasta la semana próxima el tratamiento de ampliación de la convertibilidad, mientras el PJ hace una demostración de fuerza.
En tanto transcurre esta demora en el tratamiento de leyes -como la que acota el "dos por uno" y la de ampliación de la convertibilidad al euro-, el peronismo espera que el gobierno actúe "para detener esta persecución política" y "la politización de la justicia".
El Salón Azul del Parlamento será el epicentro, a partir de las 12, de la asamblea de dirigentes justicialistas, con algunas de las características de un congreso partidario, ya que se espera la presencia de unos 600 dirigentes, incluidos los de primera línea.
