El legislador santafesino dijo que esa iniciativa aún no llegó a la Cámara baja, y consideró que esta idea "es como salir a jugar la última ficha, y puede ser que al Gobierno le vaya bien y se salva, o sale del juego".

De hecho, el proyecto cuenta con resistencias en el propio oficialismo, donde si bien el secretario de Hacienda Jorge Baldrich dijo que se trata de "una iniciativa legislativa compartida por el Poder Ejecutivo y un conjunto de gobernadores que son los que presentaron la propuesta", el propio presidente de la Cámara baja, Rafael Pascual, manifestó que el proyecto tendrá dificultades para ser tratado en Diputados, donde la Alianza es mayoría.

"Veo difícil que vaya a tratarse", dijo Pascual. "Era un artículo del proyecto de ley de atribuciones especiales que se envió al Congreso y, en su oportunidad, la Cámara de Diputados lo quitó del texto", recordó.

Con esta iniciativa Cavallo busca respaldar los títulos públicos con la recaudación de impuestos, para alejar los temores de cesación de pagos de las obligaciones. El proyecto implicaría considerar a los tenedores de títulos como acreedores privilegiados del Estado, con prioridad para cobrar antes que los jubilados y empleados públicos.

Otro que opinó fue el diputado socialista Héctor Polino, que supo formar parte de la Alianza, y quien sostiene ahora que "esta pretensión no será aceptada por el Congreso, porque ya fue rechazada en la oportunidad de tratar la delegación de facultades" a Cavallo.

El diputado Lamberto, en tanto, destacó que el proyecto "es bastante complejo" ya que requiere "de un gran acuerdo nacional, entre el gobierno central y los gobernadores y todas las fuerzas políticas". Lamberto afirmó que el Gobierno "no anda bien" en materia fiscal, y señaló que la recaudación por el impuesto a las transacciones financieras "es la única que funciona bien, porque en los demás rubros se recauda menos".

Afirmó que el argumento para garantizar el pago de la deuda es "que en todo el mundo las reservas son embargables y en Argentina no".