Los relojes deberán ser atrasados una hora cuando llegue la cero del domingo 24 de junio, con el fin de "aprovechar mejor la luz solar y permitir un mayor ahorro de energía".
Así lo confirmaron en el marco de una conferencia de prensa realizada en el Congreso de la Nación el subsecretario de Energía, Alejandro Gallino, el senador Pedro del Piero (Frepaso) y el diputado Jorge Zapata Mercader (Demócrata de Mendoza).
Según expresaron, "hay coincidencias en distintos estudios realizados por Salud Pública en cuanto a que el ritmo biológico de las personas es mejor cuando la población laboral o los estudiantes inician el día con el alba y no durante horas con poca luz".
En 1999 se aprobó una ley que estableció la correcta utilización de los husos horarios en el país y que obligó a dos cambios de horarios por año, uno en marzo y otro en octubre.
Gallino dijo que "que algunos medios informaron el cambio para el próximo fin de semana, tomando una fecha tentativa que manejábamos cuando confeccionábamos el decreto, pero una consulta con la empresa Cammesa y las distribuidoras arrojó que se precisaba más tiempo". El funcionario indicó que la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (Cammesa) pidió más tiempo para hacer los ajustes a su red informática y que lo mismo hicieron las distribuidoras para corregir medidores industriales.
En el caso de las que operan en el área metropolitana -Edenor y Edesur- estás necesitan unos días para adaptar a los nuevos horarios nueve mil medidores industriales que "utilizan un mix de energía de Hora Pico y Hora Valle", explicó.
La medida devuelve a Argentina al Huso Horario 4 (HH4) -cuatro horas al Oeste de Greenwich- que es el que le corresponde por ubicación geográfica y abandona el HH3. que viene utilizando y que es el que corresponde a Brasil.
En cuanto a si el cambio de hora implica alguna reducción del consumo eléctrico, el subsecretario explicó que "la energía que consumiría el país si Argentina estuviese todo el año con el Huso Horario 4 tendría una leve disminución". Pero como Argentina viene rigiéndose por el Huso Horario 3, en este momento no implicará ningún tipo de ahorro de electricidad.
Por su parte uno de los autores de la ley, el senador Pedro Del Piero, respondiendo a algunos cuestionamientos dijo que "el tema central del cambio de hora, no es la seguridad, si bien la luminosidad es un dato importante, no es excluyente, para eliminar los problemas de ese tipo".
"Acá de lo que se trata es de que vivamos en la normalidad, es decir, de acuerdo a como funciona el resto del mundo", afirmó.
Del Piero dijo que "el horario actual, en invierno nos obliga a funcionar entre una y dos horas -entre las 6 y las 8 de la mañana-, con luz artificial. Recordó el caso extremo de Mendoza que a comienzos del invierno amanece entre 9 y 9.20 horas. Citó también razones ambientales, ya que "en las horas de la madrugada son las de mayor polución, porque la oscuridad concentra las partículas contaminantes suspendidas en la atmósfera, en tanto que la luz solar las despeja".