Los empleados legislativos efectuaron un nuevo paro de actividades y una ruidosa protesta, en la cual coparon los salones contiguos al recinto de sesiones del Senado, en rechazo al proyecto de ajuste de recortes del gasto en los tres poderes del Estado.
Los trabajadores agrupados a la Asociación del Personal Legislativo (APL) volvieron a repetir la misma protesta que hicieron el viernes pasado cuando paralizaron las actividades y coparon el Salón de Pasos Perdidos para expresar su oposición a la propuesta del oficialismo.
Provistos de banderas, pancartas y bombos, los empleados del Congreso coparon desde el mediodía los salones contiguos al recinto de sesiones haciendo sentir su protesta con cánticos y tirando papelitos en todo el ámbito del Parlamento. Los integrantes de APL circunscribieron la realización de la protesta a los salones "Azul" y "Carlos Perete", en tanto que los accesos al recinto permanecieron fuertemente custodiados por personal de seguridad.
El titular del gremio, Ricardo Sablich, criticó al Gobierno nacional por el ajuste pero se pronunció a favor de que se desarrolle "una jornada pacífica" para que "se fortalezca la institución". Sablich insistió en que la agresión ocurrida la viernes último contra el jefe del bloque de diputados de la Alianza, Darío Alessandro, "no tiene nada que ver con los trabajadores legislativos".
El sindicalista calificó como "muy responsable" la negativa del bloque justicialista a tratar la iniciativa que giró Diputados para fijar el "déficit cero".
"A partir del viernes se hablaba de un piso de mil pesos, pero el sábado integrantes del Ejecutivo dijeron que el piso podía ser de 300, 500 y ahora dicen 575. Me parece que es una falta de respeto muy grande y una actitud miserable", enfatizó Sablich.
