El anuncio correspondió al flamante titular del bloque de frepasistas rebeldes, el tucumano José Vitar, quien anticipó además el apoyo de los quince diputados de su sector a la derogación de los poderes delegados al Poder Ejecutivo al destacar que "no hay ningún elemento que justifique que el Gobierno retenga esas facultades que no fueron bien utilizadas".

Respecto a algunas de las medidas anunciadas por el presidente De la Rúa, criticó por ejemplo la destinada a garantizar la renegociación de la deuda pública con la recaudación del impuesto a las transferencias financieras. "Son poco claros los mecanismos de reestructuración de la deuda y así como nos opusimos cuando se intentó utilizar la recaudación para garantizar la deuda, nos seguimos oponiendo", afirmó.

Otro que se quejó fue Alejandro Peyrou, quien puso énfasis en un punto conflictivo relacionado con la delegación de facultades legislativas. "Por lo que pudimos leer el texto del decreto tiene a darle más superpoderes al ministro Cavallo", advirtió.

En lo que sí no se pronunciaron los frepasistas rebeldes fue respecto al deseo adelantado por diputados del ARI de iniciarle un juicio político a Domingo Cavallo. "No fue analizado orgánicamente por la bancada", fue la escueta respuesta de Vitar ante la consulta.

A propósito del ARI, los socialistas que integran ese bloque cuestionaron lo que consideraron un "difuso plan" económico, al que estimaron como "sólo una variante de la política de ajuste sobre ajuste iniciada por José Martínez de Hoz". Los legisladores del ARI apuntaron que el programa "sólo apunta a beneficiar a los acreedores externos y a los grandes grupos económicos".

"El presidente y ese gerente de los acreedores que tiene como ministro de Economía anunciaron un difuso plan difuso que parte de una concepción errónea sobre el origen y el crecimiento de la deuda externa", indicaron a través de un documento firmado por los diputados Alfredo Bravo, Jorge Rivas, Héctor Polino y Oscar González, en el que remarcaron que "el único compromiso que hay que honrar es la deuda con el pueblo".

De forma individual, Héctor Polino señaló que "de las palabras del Presidente y del ministro de Economía se desprende claramente que se mantendrá la esencia regresiva y recesiva del modelo económico. Se disfraza de revolucionaria toda una arquitectura que tiene como objetivo la defensa de los beneficios que han obtenido las grandes empresas y en cambio se otorga una migaja a los sectores de menores recursos".

Volviendo a los frepasistas, María América González calificó como una "estafa" la presentación como un aumento salarial de la reducción en seis puntos de los aportes de los trabajadores a las AFJP, señalando que "las comisiones de las AFJP van a tener que bajar sí o sí, porque si bajan los aportes y no las comisiones es una estafa decirle al trabajador que va a cobrar más cuando se va a jubilar por menos".

También cuestionó el otorgamiento de asignaciones familiares a personas desempleadas y con bajos recursos, al afirmar que "en realidad se le quita a los trabajadores activos para distribuir entre los que menos tienen, con lo que la deuda se vuelve a repartir entre los trabajadores".

Entre los proyectos que pretende tratar el ala rebelde del Frepaso tras la declaración de sesión permanente de la Cámara de Diputados figura la creación de una comisión de seguimiento y análisis de las negociaciones de la deuda pública. También proponen la aprobación de normas para garantizar el financiamiento de programas públicos de contención social, como el seguro de desempleo, ingreso mínimo ciudadano e intangiblidad del presupuesto social y educativo vigentes.