"He venido a la Argentina con la firme voluntad de promover la acción conjunta de otros países para que concurran en ayuda financiera para la Argentina en estos momentos difíciles que le toca vivir", afirmó Fox ante unos 70 legisladores nacionales. Así, el jefe del Estado mexicano volvió a dar una nueva muestra de apoyo a la Argentina en un discurso de poco más de veinte minutos que giró en torno a los extensos lazos que unen a ambos países y en el que reivindicó la necesidad de actuar en forma conjunta en los foros internacionales.

"Sepan que la Argentina cuenta con nuestro apoyo solidario y nuestra confianza plena", aseguró Fox en uno de los pasajes más aplaudidos de su discurso ante la asamblea legislativa nacional. Más aún, el mandatario mexicano recordó que si su país aprendió alguna lección de la crisis económica que vivió en 1995 -conocida como "efecto tequila"-, esa fue "el hecho de que pudimos salir en un plazo corto y con la frente en alto".

Fox dijo ante los legisladores reunidos en el pequeño recinto del Senado que promoverá una "acción conjunta con otros países" para que la comunidad internacional "acuda ya en apoyo de la Argentina".

"En lo más oscuro se está muy cerca de la salida", alentó Fox, quien llegó al Palacio del Congreso en compañía de su esposa Marta, la titular de la Cámara baja de su país, Beatriz Paredes, e integrantes de su gabinete.

El jefe de Estado ingresó al Palacio del Congreso por la puerta principal que da a la avenida Callao, donde fue recibido por una comitiva de legisladores nombrada a esos efectos, de acuerdo con el protocolo. Fox se había entrevistado antes con el presidente de la Nación, Eduardo Duhalde, con quien dialogó acerca de la crisis argentina y de la experiencia mexicana en esos avatares.

La ceremonia se inició con llamativo retraso y se prolongó en total por unos cincuenta minutos con el pequeño recinto colmado de legisladores. Insistió el jefe de Estado visitante en que traía "un mensaje de confianza y solidaridad del pueblo de México en estos momentos tan difíciles para la Argentina".

Fox leyó un discurso de quince minutos que fue respondido por el presidente provisional del Senado, Carlos Maqueda, quiEn le solicitó al visitante que interponga "sus buenos oficios ante los organismos internacionales para obtener la asistencia que el país tanto necesita".

Escoltado por el titular de la Cámara baja, Eduardo Camaño, Maqueda también señaló que la Argentina debía tener en cuenta el ejemplo de México que consiguió emerger en poco tiempo de la crisis financiera que estalló en 1995, e impactó en el mundo con el llamado "efecto tequila".

El presidente mexicano había dicho precisamente al respecto que "si hay una lección de la crisis mexicana es que el país salió adelante con la frente alta en un plazo corto de tiempo".

El jefe de estado visitante insistió en expresar la "solidaridad" del pueblo mexicano con el argentino, así como la "confianza" de su gobierno en que la Argentina conseguirá superar la crisis.

"Me voy tranquilo y confiado de que hay un rumbo", dijo Fox en uno de los párrafos finales de su discurso que utilizó para manifestar su apoyo al gobierno.