Los precandidatos presidenciales del radicalismo, Rodolfo Terragno y Leopoldo Moreau, repudiaron los atentados perpetrados contra las sedes del Comité Nacional de la UCR y el Consejo Nacional del Justicialismo.
Terragno, en una carta dirigida al titular del radicalismo, Angel Rozas, se mostró "conmovido" por ambos ataques y sostuvo que "el tronar de ese artefacto fue el eco de una época tenebrosa, durante la cual la razón fuera sustituida por la violencia".
"La agresión sufrida un año atrás ya había sido expresión de una actitud totalitaria y repudiable. La bomba actual, no se ha dado, siquiera, en un clima de intranquilidad pública. Es un ataque en frío. Este ataque nos une a todos", aseveró el senador nacional de la UCR en la misiva.
A su vez Moreau, tras visitar la sede partidaria de Alsina 1786, afirmó que ambos atentados "ponen de manifiesto el accionar de grupos que pretenden interferir en el proceso democrático y generar condiciones para el caos y la anarquía".
"Pueden ser tanto de ultra izquierda como de ultra derecha porque si bien ni uno ni otros están en condiciones de gobernar, sí creen que pueden impedir que la democracia gobierne", aseveró el legislador, quien exhortó a "dejar de lado la guerra de todos contra todos que sólo favorece a las minorías autoritarias".
Por su parte, el bloque de diputados nacionales del radicalismo condenó "enérgicamente" los atentados "contra las sedes partidarias del PJ y la UCR", al sostener que "el país se debate hoy en una dura crisis, la cual es necesaria afrontar a todo nivel con el mayor equilibrio y esfuerzo".
"El radicalismo ha transitado y ha propuesto siempre el camino de la paz para la búsqueda de soluciones. Vamos a continuar con esa prédica y esa práctica, imponiéndonos como individuos y como partido seguir apostando por la paz sin claudicar en el objetivo central que es la reconstrucción de nuestro país", enfatizaron.
También la ex radical y diputada nacional por el ARI Elisa Carrió repudió los atentados, haciendo de paso un llamado a "la paz". Sostuvo que es "el único elemento que abre la posibilidad de construir una nueva Argentina, que es el camino que quiere recorrer la mayoría de este pueblo, el camino de los argentinos decentes y honestos que quieren las cosas esenciales de la vida sin violencia".
En un comunicado de prensa, Carrió insistió en su reclamo de la lucha por la no violencia y pidió mirar para adelante y tener como objetivo nacional la construcción de la paz. "Ir por la paz es una consigna muy profunda, porque significa que un pueblo pueda dar vuelta ciento ochenta grados su historia de violencia y todos los actos violentos no hacen más que poner escollos al nacimiento de una sociedad pacífica", aseveró la diputada nacional.