La polémica actriz Elena Cruz, muy criticada en su momento por lamentar que el ex presidente de facto Jorge Videla estuviera preso, regresó ayer de Miami con la firme intención de asumir como legisladora porteña en la banca que dejó vacante Alberto Fernández al ocupar la Jefatura de Gabinete del flamante gobierno de Kirchner.
"He venido a cumplir con mi deber", señaló Cruz, de 76 años, tras lo cual intentó restarle trascendencia a sus declaraciones de hace tres años diciendo que lo que hizo en aquella oportunidad fue "lamentar que haya presos políticos".
"Por las renuncias entro yo, y he venido a cumplir con mi deber", indicó la esposa del también actor Fernando Siro. Pero Alberto Fernández puso en duda que ocupe una banca ya que, según dijo, "difícilmente su diploma sea aceptado" por la Legislatura.
De hecho, Cristian Caram, vicepresidente primero de la Legislatura porteña, advirtió ayer que buscará "hasta el último resquicio de la ley para evitar la asunción" de Elena Cruz como legisladora de la ciudad por el partido Acción por la República.
"Si no encontramos cómo evitarlo, entonces le vamos a pedir a Cavallo y a Beliz que se hagan cargo de su candidata convenciéndola para que no asuma", sostuvo Caram en un comunicado de prensa.
Elena Cruz asumiría por el partido Acción por la República en reemplazo del nuevo jefe de Gabinete, quien integraba la lista de candidatos a legisladores que en 2000 llevaba como candidato a jefe de Gobierno porteño a Domingo Cavallo.
