La Comisión de Juicio Político de la Cámara baja comenzó formalmente el proceso de juicio político contra el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Julio Nazareno, al declarar la admisibilidad del estudio del denominado caso Magariños, por el que se lo acusa de haberse excedido en sus funciones al aplicar una sanción contra un juez.
Además, la Comisión resolvió encarar una consulta a prestigiosos especialistas en derecho constitucional para que ponderen la legalidad de reflotar las causales por las que Nazareno había sido acusado el año pasado en un dictamen que en el recinto cosechó el respaldo mayoritario pero no alcanzó por apenas trece votos los dos tercios requeridos para la acusación.
Según estimó la diputada del ARI Elisa Carrió, "en unos 20 días" la comisión podría firmar el dictamen que, según confiaron voceros del cuerpo, será acusatorio y se cumpliría así el paso formal para discutir las acusaciones en el recinto.
El cálculo de la diputada está en línea con las previsiones del presidente de la comisión, el justicialista tucumano José Falú, que estimó que "para julio podríamos estar acusando a Nazareno" ante el plenario de la Cámara baja, donde se necesita el voto de los dos tercios del total del cuerpo para aprobar el proceso.
En la reunión de comisión se incorporaron además tres nuevas acusaciones presentadas por el radical santafesino Carlos Iparraguirre vinculadas con devolución de 29 millones de pesos a la empresa Meller; el sobreseimiento de directivos de Sevel en una causa por evasión fiscal y otro caso relacionado con la causa por la venta de armas a Croacia y Ecuador.
La reunión de la comisión se produjo pocas horas después de que el presidente Néstor Kirchner difundiera por la cadena nacional de radio y televisión un enérgico mensaje en el que reclamó "urgencia" en el tratamiento de las acusaciones contra los miembros de la Corte Suprema, y diera un impulso a la actuación del Congreso en esos casos. Paralelamente, la comisión compuesta por 24 miembros, decidió convocar a juristas de renombre para que evalúen si los cargos promovidos contra Nazareno el año pasado y que no fueron aprobados en el recinto, suponen "cosa juzgada" o pueden incorporarse a la nueva acusación.
De este modo, se convocará a la comisión a los juristas Melchor Cruchaga, Ricardo Gil Lavedra y Alberto Dalla Vía, a propuesta de la UCR; a Humberto Quiroga por sugerencia del Frepaso y a Miguel Ibarlucía, por moción del socialismo.
Más allá de lo que defina el grupo de juristas, la comisión consensuó incorporar el grueso de acusaciones esgrimidas contra Nazareno el año pasado -de más peso legal que las actuales- como un "cuerpo de antecedentes" que instale la prueba de "inhabilidad" para ejercer el cargo.
La voluntad política del Gobierno no fue mencionada en la reunión a puertas cerradas de Juicio Político pero sobrevoló cada una de las intervenciones de los legisladores de todos los bloques.
En este sentido, un legislador radical que integra la comisión señaló que, con el apoyo del Gobierno, la "idea" es avanzar primero sobre Nazareno por ser el símbolo de la Corte adicta y luego sobre el resto de los miembros, aunque los casos se estudiarán uno a uno".
El caso utilizado como punta de lanza del cuestionamiento a Nazareno, está vinculado con una sanción económica impuesta al juez criminal Mario Magariños por haber emitido una opinión jurídica sobre un caso cerrado en la Justicia argentina.
La sanción contra el magistrado fue firmada por la llamada "mayoría automática" y representaría a criterio de la comisión, un "exceso" en las funciones ya que la cuestión disciplinaria entre los jueces es un atributo exclusivo del Consejo de la Magistratura.
La comisión trabajó con un criterio unificado y sin disensos, a excepción de un "lamento" del sector justicialista por las causas perdidas contra Nazareno en el proceso que se instruyó el año pasado y que ahora deberá definirse si pueden utilizarse o son ya cosa juzgada.
El presidente de la Comisión de Juicio Político de Diputados, Ricardo Falú, señaló que existen "pruebas que acreditan el mal desempeño" del presidente de la Corte y confió en que nadie "meta la cola" para frenar el proceso.
"Hay numerosas causas que, en su conjunto, constituyen una prueba compleja que va acreditar el mal desempeño de Nazareno en el cargo", sostuvo Falú al evaluar las acusaciones contra el ministro, que la comisión declaró "admisibles" y comenzó a investigar.
Falú destacó que la decisión de la comisión "es independiente del discurso" que pronunció el presidente Néstor Kirchner instando a una rápida resolución de los enjuiciamientos a los magistrados. "Los mecanismos en la comisión de Juicio Político, ya estaban en marcha. El discurso del presidente da seguridad al resto del Congreso de que se va a seguir adelante y que el diablo no va a meter la cola para que se frustre", evaluó el legislador.