El ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Beliz, impulsó un proyecto legislativo para regular y transparentar la compraventa de repuestos de autos usados y combatir el "mercado negro de los desarmaderos". El proyecto tiene media sanción del Senado -fue elaborado por la legisladora justicialista mendocina María Perceval- y ahora el Gobierno busca que la Cámara de Diputados lo convierta en ley en las próximas semanas.
En una conferencia de prensa realizada en la cartera de Justicia, Perceval destacó que "el proyecto permitirá regular con reglas de juego claras los desarmaderos de automotores", y posibilitará "crear un circuito integral de información de esta actividad comercial".
"Con el nuevo registro de desarmaderos se está rompiendo una barrera de vacío legal que muchas veces le impidió a las autoridades actuar", dijo el ministro tras una reunión que mantuvo con la citada Perceval, otros legisladores nacionales y autoridades de la Policía Federal.
Beliz resaltó la necesidad de aprobar el proyecto de ley impulsado por la legisladora Perceval, el cual ya cuenta con media sanción en el Senado y que se encuentra actualmente en la Cámara baja para ser analizado. En esa iniciativa de la senadora, que presentó una estadística en la que se señala que se roban 270 vehículos por día y unos 100 mil por año en todo el país, se establece un "régimen legal para el desarmado de automotores y venta de sus autopartes".
Según la propuesta, "todo propietario de un automotor que proceda a su desarmado deberá solicitar su baja ante el Registro del automotor que corresponda".
Luego, se deberá contar con un certificado de baja y desarme y elaborar un legajo, en el cual deberá quedar la documentación y el registro del vehículo. El artículo 9 del proyecto establece la creación del Registro Unico de Desarmaderos de Automotores y Actividades Conexas, al cual deberán inscribirse todas las personas que tengan como actividad el desarmado y comercialización de las autopartes.
La senadora Perceval aseguró que su proyecto fue presentado en junio del año pasado y aprobado por unanimidad en noviembre, tras lo cual pasó a la Cámara de Diputados para ser analizado.
Beliz expresó que "va a existir un registro que va a comenzar en la propia fábrica del vehículo y, cada una de las entidades que comercialicen el repuesto, van a tener que tener identificadas las partes a través del Registro del Automotor, para que no puedan dudarse sobre la legalidad de esas partes".
El proyecto, que fue aprobado en noviembre del 2002 por la Cámara alta, crea un registro único de desarmaderos y obliga a los propietarios de los autos a certificar la baja del automóvil y su posterior desarme. Además, la iniciativa facultará a la Policía Federal para que realice las inspecciones de todas las personas físicas o jurídicas cuya actividad sea el desarmado de automotores y el almacenamiento de repuestos para autos.
Asimismo, el proyecto permitirá numerar y registrar las autopartes antes de su venta -mediante un certificado de baja y desarme-, y establece que las piezas que no puedan ser recicladas deberán ser destruidas.
Por otro lado, el Registro Nacional de Propiedad del Automotor deberá confeccionar el legajo, retener la documentación de identificación y el registro del vehículo, y solicitar la entrega de una foto color al momento de la entrega.