La Legislatura porteña aprobó la expropiación de la empresa textil Brukman, y la planta será entregada a una cooperativa conformada por los trabajadores de la planta, que la mantuvieron en funcionamiento varios meses después de que los dueños la abandonaran.
"La declararon de utilidad pública, que hace al bien común, por lo que no será liquidada. Habrá una indemnización para acreedores y trabajadores", sostuvo Luis Caro, abogado de los ex empleados de la firma textil, a la que la justicia le había declarado la quiebra el pasado 20 de octubre.
La nueva historia de Brukman, una empresa de trajes de alta calidad, comenzó a escribirse junto con dos fechas que pasarán a la historia: el 19 y 20 de diciembre de 2001.
Tras ser aprobada la expropiación, el edificio y los bienes muebles e intangibles de la ex empresa Brukman serán destinados a la Cooperativa "18 de Diciembre" que integran los trabajadores de la textil.
En medio una gran manifestación de trabajadores de la textil que, junto con agrupaciones de izquierda que fueron a apoyarlos, se concentraron en la puerta de la Legislatura desde el mediodía, la Legislatura declaró de "Utilidad Pública y sujeto a ocupación temporaria" el inmueble de la ex Brukman, de Jujuy 554.
Con la aprobación a cuestas, los trabajadores marcharon esta noche hacia las carpas instaladas en la plaza ubicada al lado del inmueble, para continuar allí aguardando que la justicia resuelva la reapertura del edificio, que podría llevarse a cabo dentro de un mes. Los únicos legisladores que se opusieron al proyecto que involucra la ex fábrica Brukman fueron los centroderechistas Julio Crespo Campos, Jorge Enríquez y Fernando Caeiro.
La Cooperativa de Trabajo, según fuentes legislativas, está integrada por unos 60 trabajadores, pero con la vigencia de la ley será abierto un registro para incorporar como socios a los restantes trabajadores.