El escrito que acreditaría el presunto pago de coimas en el Senado para la aprobación de la Ley de Reforma Laboral en el 2000 y su agenda personal de esa época, fueron entregados finalmente por el arrepentido ex secretario parlamentario Mario Pontaquarto al juez federal Rodolfo Canicoba Corral.
En tanto, Martín Fraga Mancini, un empleado del Senado que fue secretario del ahora ex senador Remo Costanzo, desmintió, al declarar ante el magistrado, tener conocimiento del supuesto pago de sobornos para la aprobación de la Ley de Reforma Laboral en el 2002. En este sentido, el abogado defensor del empleado, Pedro Bommer, consignó que, en su indagatoria, que duró unas tres horas, Fraga Mancini había afirmado "no conocer" al arrepentido ex secretario parlamentario Mario Pontaquarto, quien el viernes había indicado que él tenía conocimiento del supuesto pago de sobornos y que podría aportar elementos a la causa.
Fraga Mancini desmintió "totalmente" la declaración del ex funcionario Mario Pontaquarto sobre el supuesto pago de sobornos en la Cámara alta, y los fiscales ya pidieron un careo entre ambos, mientras avanza la definición de nuevas medidas procesales. Por lo pronto, el juez federal Rodolfo Canicoba Corral confirmó la prohibición de abandonar el país de 18 personas que fueron señaladas en la causa, entre ellos, el ex presidente Fernando de la Rúa; el ex ministro de Trabajo Alberto Flamarique, el ex titular de la SIDE Fernando de Santibañes y un grupo de ex senadores.
La expectativa judicial estuvo puesta en la presentación del listado que aportó Pontaquarto en la que figuran nombres de senadores y cifras que supuestamente habrían cobrado para aprobar la reforma laboral; y en la declaración de Fraga Mancini, quien se desempeñó como secretario del ex legislador Remo Costanzo.
Los investigadores tenían gran interés en escuchar la declaración del ex secretario de Costanzo, porque Pontaquarto dijo ante la Justicia que Fraga Mancini le había manifestado en reiteradas oportunidades que quería "blanquear" todo lo vinculado al supuesto pago de sobornos.
Sin embargo, ante el juez Canicoba Corral, Fraga Mancini desmintió "totalmente" todo lo que declaró Pontaquarto y su abogado, Pedro Blommer, calificó la confesión como "un gran disparate".
Dada la notoria contradicción entre los dichos de los dos involucrados en la causa, los fiscales Eduardo Freiler y Federido Delgado solicitaron al juez que ordene urgente un "careo" entre ambos, pero antes de adoptar esa medida Canicoba Corral evaluaba la posibilidad de tomarle nuevamente declaración a Pontaquarto.
El ex secretario parlamentario se presentó con su defensor, Hugo Wortman Jofre, en los Tribunales Federales de Retiro para aportar un "listado" con los nombres de ocho senadores que habrían cobrado entre "50 mil y 300 mil pesos" en sobornos para impulsar la sanción de la Ley de Reforma Laboral en abril de 2000.
Entre esos ex senadores se encuentran Augusto Alasino, Alberto Tell, Remo Constanzo, Julio San Millán, Hugo Sager, José Luis Gioja (actual gobernador de San Juan), Beatriz Raijer y Carlos de la Rosa, entre otros. Justamente Canicoba Corral estaba esperando la llegada de ese "documento" para diponer la prohibición de abandonar el país de varios ex funcionarios y los ex senadores Emilio Cantarero, Ramón Ortega, Eduardo Bauzá, Javier Meneghini, Alberto Tell, Angel Pardo, Raúl Galván y Ricardo Branda.
El listado se completa con Augusto Alasino, Alcides López, Remo Constanzo, Fraga Mancini, Pontaquarto, José Genoud y el ex secretario de Finanzas de la SIDE, Juan Gallea.
Vestido con un traje gris claro, Fraga Mancini arribó a los Tribunales Federales de Retiro a las 10:15 y amplió su declaración indagatoria durante más de dos horas ya que había declarado en la causa a fines de 2000.
Fuentes que presenciaron la audiencia indicaron que Fraga Mancini, quien actualmente se desempeña en la secretaría de prensa del Bloque del Partido Justicialista, se mostró "indignado", con una actitud de "negación" durante la audiencia y en varias oportunidades se remitió a su declaración anterior en el expediente.
Con respecto a Pontaquarto dijo que sólo lo conocía "de manera circunstancial" ya que no lo había visto "más de dos veces" en su vida".
"La declaración se basó en tres ejes: que no conocía profundamente a Pontaquarto, que éste nunca le habló de que los sobornos existieron y por lo tanto mal pudo haber hablado de lo que no conocía", explicó una fuente allegada la causa.
Al ser consultado sobre si durante estos días recibió llamados intimidatorias de personas señaladas en la investigación, Fraga Mancini dijo que sólo lo llamó su ex jefe Costanzo "para solidarizarse" con su situación, aunque no explicó los alcances de esa comunicación.
Al finalizar la audiencia, el defensor Fraga Mancini -quien tiene una falta de mérito en la causa- relativizó la confesión del arrepentido Pontaquarto y dijo que sólo declaró "una gran cantidad de mentiras".
Pontaquarto "sólo quiso desplazar responsabilidad en personas que no tienen nada que ver" precisó Blommer en relación al Fraga Mancini sobre quien el ex secretario Parlamentario dijo que tenía intenciones de "blanquear" las circunstancias que rodearon el pago de sobornos.
Además, el abogado explicó que su defendido dio precisiones sobre un viaje a Cuba que realizó con su esposa hace tres años en una fecha posterior al presunto pago de sobornos, y que algunas versiones mencionaron como un "regalo" de Costanzo porque lo veía "afectado" por el caso.
Sin embargo, hoy ante los investigadores, el empleado del Senado dijo que ese viaje se lo costeó de su bolsillo con "cheques de su esposa" y que lo realizó con motivo de cumplir un aniversario de boda.