Los ex senadores nacionales José Genoud y Emilio Cantarero y el ex jefe de la SIDE Fernando de Santibañes fueron citados para los días 7, 8 y 9 de enero, respectivamente, para declarar como imputados por el delito de cohecho, en la causa que investiga el supuesto pago de coimas para la aprobación de la reforma laboral.
Las audiencias fueron dispuestas por el juez federal Rodolfo Canicoba Corral, quien para el 5 de enero tiene previsto interrogar como testigo a Gladys Motta, la ex secretaria de De Santibañes, que fue mencionada por el "arrepentido" Mario Pontaquarto como quien le entregó el dinero para los senadores en la bóveda de la SIDE. Hasta esos días, debido a los asuetos dispuestos por el Poder Ejecutivo con motivo de las fiestas navideñas, la actividad en la causa se limitará a tareas internas del juzgado y la secretaría, para ultimar los detalles de los interrogatorios y seguir recolectando pruebas.
Fuentes vinculadas a la causa informaron que el tribunal aguarda las contestaciones a oficios cursados a compañías telefónicas para sumarlas a los informes que ya remitió Movicom, sobre las llamadas entrantes y salientes de los teléfonos de Pontaquarto y los legisladores involucrados en el sumario.
Otra de las contestaciones que espera Canicoba Corral es la respuesta de Presidencia de la Nación a un pedido de informe sobre el detalle de las personas que ingresaron en la Residencia de Olivos durante marzo y abril de 2000.
El juez dispuso algunas medidas complementarias, para conocer datos y relaciones de algunos de los implicados, ya que -según explicaron allegados a la pesquisa- "resulta que ahora nadie conoce a Pontaquarto".
Por su parte, la ex secretaria del jefe de la SIDE había expresado su intención de brindar su testimonio, pero el magistrado prefirió aguardar la autorización de los médicos forenses, ya que la mujer sufrió un accidente con consecuencias físicas y síquicas. La declaración de la mujer fue fijada unos días antes de la indagatoria a Genoud, Cantarero y De Santibañes, ya que Motta podría mencionar hechos que luego se presenten como cargos contra los imputados.
Según reveló Pontaquarto, Motta fue quien, por indicación de De Santibañes, le entregó al ex secretario parlamentario el maletín, la valija y la caja con 5 millones de pesos destinados al pago de las coimas.
El magistrado también tiene previsto interrogar como testigo al ex jefe de Gabinete delarruísta, Rodolfo Terragno, a raíz de declaraciones en los medios de comunicación en las que aseguró que llevaba un "diario" en el que volcaba las reuniones que había mantenido en torno al tema de las coimas.
"No hay duda de que en lo importante, quien ejercía el mayor poder era De Santibañes", enfatizó Terragno, ex jefe de Gabinete durante la gestión de Fernando de la Rúa. Terragno se pronunció de esa forma luego de que trascendiera que De Santibañes será convocado a declarar como sospechoso ante la Justicia -junto con el ex senador justicialista Emilio Cantarero- en la causa que se sigue por los presuntos sobornos en el Senado, que lleva adelante el magistrado Rodolfo Canicoba Corral.
Terragno afirmó que está esperando ser citado como testigo en la causa que investiga el juez federal Rodolfo Canicoba Corral por el supuesto pago de coimas a senadores para la aprobación de la reforma laboral. "Voy a ratificarlo todo, punto por punto, y ahora tendrán que oírme los que hace 3 años se hicieron los sordos", señaló Terragno.
Según el ex jefe de Gabinete, lo que ahora hizo público es "lo mismo" que viene diciendo desde el 2000. "Sólo que antes se trataba de ocultar mis dichos, y ahora ya no se puede, porque la confesión de Mario Pontaquarto ha matado la ilusión de quienes pensaban que esto iba a quedar en la nada", explicó.
Las fuentes consultadas expresaron su "sorpresa" por el "manejo de esta profusa investigación" que dice poseer Terragno ya que cuando declaró por primera vez, hace tres años, dijo no poseer elementos para el esclarecimiento de la causa. La declaración testimonial de Terragno fue solicitada por los fiscales Eduardo Freiler y Federico Delgado a raíz de las declaraciones en las que admitió tener un "diario" en el que anotaba charlas y reuniones que mantenía relacionadas al tema del pago de sobornos.
Paralelamente se supo que Emilio Cantarero será sometido a una pericia caligráfica cuando, a principios de enero, preste declaración indagatoria en el marco de la causa que investiga los presuntos sobornos en el Senado con el fin de deteminar si fue el autor del escrito que el arrepentido Mario Pontaquarto presentó como prueba ante la Justicia.
Con este escrito -que muestra apellidos o apodos de legisladores y, al lado, un detalle de cifras con la supuesta suma de dinero que habrían recibido como soborno para la aprobación de la Ley de Reforma Laboral-, el ex secretario parlamentario incriminó directamente como su supuesto autor a Cantarero.
Sin embargo, un informe preliminar sobre el "documento" indicó que "no son suficientes" los elementos manuscritos para realizar una pericia caligráfica sobre ese escrito con el fin de poder determinar su autoría.
Así lo indicaron fuentes tribunalicias, quienes señalaron que, por ese motivo, en los primeros días de enero, cuando deba prestar declaración indagatoria ante el juez federal Rodolfo Canicoba Corral, se le exigirá que haga un "cuerpo de escritura" con el fin de poder someterlo a una pericia caligráfica.
Según el "documento" que entregó Pontaquarto (y que dice haber recibido de manos de Cantarero) hay cifras manuscritas que van desde los 300 mil a los 50 mil pesos, al lado de los nombres mecanografiados de los senadores y una especie de rúbrica, a modo de media firma u "okey".