El proyecto de reforma laboral que reemplazará a norma aprobada mediante el pago de sobornos durante el gobierno de Fernando de la Rúa se convertirá finalmente en ley mañana, cuando la Cámara de Diputados le dé tratamiento a la iniciativa en sesión especial.
La iniciativa, que tiene media sanción del Senado, será aprobada definitivamente pasado mañana luego de que los diputados la traten en el recinto, donde se espera un debate más extenso que en la Cámara alta, debido a la cantidad de bloques que la integran -alrededor de 30-.
"Nos vamos a sentar en las bancas hasta que las velas no ardan. Vamos a debatirla y terminaremos aprobándola a última hora pero la vamos a convertir en ley seguramente el martes", anunció en declaraciones a la prensa un diputado nacional del justicialismo bonaerense.
Si bien el radicalismo anticipó que votará a favor del proyecto, los integrantes del bloque que preside Horacio Pernasetti ratificaron que plantearán en el recinto de la Cámara baja sus disidencias cuando la iniciativa se trate en particular.
Por su parte, los bloques más pequeños, como el ARI, el socialismo y el monobloque de Claudio Lozano presentaron un dictamen en minoría que pide la anulación y no la derogación de la ley sospechada de haber sido aprobada mediante sobornos.
Con la aprobación de esta norma, la polémica 25.250 llegará a su fin luego de casi cuatro años de vigencia y comenzará a regir un nuevo marco laboral que restablecerá derechos cercenados a los trabajadores, como la primacía del convenio más favorable, el mantenimiento de la ultraactividad y la limitación a tres meses del período de prueba.
La propuesta de convocar a una sesión especial para tratar la nueva reforma laboral surgió el miércoles pasado desde el PJ, que ante la negativa de sus pares de la UCR a debatir ese día la nueva reforma, aceptó el planteo de la oposición de postergar la discusión en el recinto.
Es que el oficialismo pretendía debatir la iniciativa en el período de sesiones extraordinarias y convertirla en ley antes de que el presidente Néstor Kirchner inaugure hoy las sesiones ordinarias del Parlamento, pero el cambio de día convertirá a la reforma en la primera sanción del nuevo ciclo.
Sí logró el justicialismo acordar con los bloques mayoritarios la firma del dictamen de la comisión de Legislación del Trabajo, que preside Saúl Ubaldini, que no tuvo modificaciones respecto al texto enviado por el Senado y mantiene los principales ejes del proyecto impulsado por el ejecutivo.
La modificación más relevante fue efectuada por el Senado en comisión y gira en torno a las facultades que tendrá el Ministerio de Trabajo para realizar inspecciones en las provincias, para lo cual se agregó que el Ejecutivo deberá informar los motivos cuando realice esas tareas a las autoridades locales.
Otro de los cambios menores que realizaron los senadores en el recinto contempla una modificación al artículo 2, inciso 6, que establece que el trabajador tendrá derecho a las prestaciones por accidente o enfermedad del trabajo, al añadir que ese beneficio se extenderá hasta la finalización del período de prueba.