Sin embargo, los diputados porteños de diferentes partidos -que se unieron detrás de esta propuesta- y que acordaron un proyecto único para acelerar el traspaso de diferentes áreas de la Policía Federal deberán superar las resistencias que existen por parte de los legisladores de otros distritos. Ese sector -integrado por 20 de los 25 diputados nacionales por el distrito porteño de un variado arco político- realizó recientemente una fuerte movida en el Congreso para pedir que avancen los proyectos que apuntan a impulsar el traspaso tanto la Policía como de la Justicia al ámbito de la ciudad.

Los principales promotores de la movida, la diputada por Encuentro Silvana Giúdide y el justicialista Cristian Ritondo, ya empezaron a tener el primer indicio de que no será sencillo poder cumplir con su intención de modificar la denominada ley Cafiero que impuso restricciones a la ciudad para contar con una Policía y una Justicia propia. Si bien el presidente del bloque justicialista, Jose María Díaz Bancalari, le trasmitió a un grupo de diputados porteños la voluntad del oficialismo de avanzar en el proyecto, legisladores de esa bancada expresaron públicamente sus objeciones el miércoles pasado en la reunión de la Comisión de Seguridad Interior.

En realidad, la cuestión presupuestario se convirtió en la principal traba para que avance el proyecto, ya que tanto los diputados bonaerenses mencionados como el justicialista santafesino Angel Baltuzzi expresaron su oposición a que la Nación aporte partidas, al sostener que esos montos deberían salir del propio Presupuesto de la ciudad.