La Comisión de Asuntos Constitucionales tratará hoy un proyecto que prorroga por dos años las facultades del Congreso delegadas al Poder Ejecutivo antes de la reforma constitucional de 1994.
La iniciativa, impulsada por la senadora justicialista Cristina Fernández de Kirchner, prorroga más de 1.900 Leyes relacionadas con la administración del Estado que se fueron acumulando a lo largo de los años y que nunca fueron ordenadas. Si el Congreso no prorroga, y además ratifica antes del 24 de agosto, lo actuado por el Poder Ejecutivo, esa parte del andamiaje jurídico del país quedaría en la cuerda floja, ya que podría ser cuestionada por una eventual inconstitucionalidad.
Esta será la tercera prórroga que se realizará, debido a que aún no se completo el digesto legislativo que permitirá saber el contenido de cada una de las normas en cuestión. Bajo el sistema de legislación delegada se aprobaron hasta la reforma de 1994, algo más de dos mil normas, en un recurso que ahora está prohibido por el artículo 76 de la Constitución Nacional.
Desde entonces sólo se autoriza la delegación de facultades en cuestiones relacionadas con la administración estatal y en casos de emergencia pública.
La nueva Constitución estableció en la cláusula transitoria octava que en cinco años los legisladores deberían convalidar las normas que surgieran del digesto; pero hasta ahora se sucedieron dos prórrogas (1999 y 2002) sin que se analizara la cuestión de fondo.
En caso de que no se apruebe la prórroga se daría una condición de inseguridad jurídica debido a que algunas situaciones jurídicas podrían perder su sustento legal.
La delegación delegada permite, entre otras cosas, la creación de entes autárquicos, como correos, bancos oficiales, entes impositivos, aduaneros y educativos; así también como la legislación en materia de servicios públicos en lo que compete al Congreso.
También prevé la organización y gobierno de las Fuerzas Armadas y la organización y atribuciones de la Jefatura de Gabinete y de los ministerios.
