La líder del ARI, Elisa Carrió, y el flamante presidente de la Convención Nacional del radicalismo, Adolfo Stubrin, coincidieron en rechazar la posibilidad de otorgar "superpoderes" al Gobierno nacional, tal cual lo establece el Presupuesto 2005, pero la dirigente arista se opuso a cualquier alianza con el centenario partido.
En declaraciones a Radio Del Plata, Carrió ratificó que se opondrá a la cesión de superpoderes, pero descartó que esta coincidencia con el radicalismo habrá una posibilidad de participar de una convocatoria en conjunto para unir fuerzas políticas y sociales en el marco del rechazo a la iniciativa oficial. A la vez condenó la postura de la UCR ya que se contradice con lo que pasó durante el Gobierno de la Alianza y que abrió el camino de su separación de la fuerza.
"Yo me fui del radicalismo por votar en contra del radicalismo cuando ellos pedían superpoderes para Cavallo", enfatizó Carrió.
En tanto, Stubrin hizo referencia a la delegación de facultades legislativas a la Jefatura de Gabinete, contempladas en el proyecto de Presupuesto 2005, y mencionó que esa potestad "es inaceptable" porque "así el Gobierno no se hace ningún favor a sí mismo".
En diferente postura que el ARI, Stubrin fue más contemplativo con las políticas oficiales al subrayar que tienen el "teléfono abierto" para cualquier "emergencia" que tenga el Gobierno nacional.
"Desde la UCR tenemos teléfono abierto para cualquiera emergencia o situación delicada. El Gobierno sabe pueden contar con nosotros en las cuestiones en la que la oposición pueda ser necesaria, como la negociación externa", afirmó Stubrin.
