Al inicio aclaró que no hablaba desde lo académico ni linguístico, sino desde la representación institucional, donde "la palabra constituye una obligación y un mandato moral, en un ámbito en el que muchas veces no sucede la coincidencia entre el significado, la promesa de la palabra y la realización concreta de los hechos". La senadora sostuvo que "frente a una sociedad tan castigada como la nuestra en cuanto al incumplimiento de promesas y de palabras, con tanto descreimiento, este día que culmina hoy tiene algo más que el valor académico, el valor linguístico, tiene el valor de que podemos hacer las cosas y las podemos hacer bien".

"Hemos podido realizar esta utopía que era este Tercer Congreso de la Lengua, acá en Rosario", dijo Fernández de Kirchner, y añadió que "esas utopías de un mundo mejor y una sociedad más justa tienen que ver con la palabra, con la concreción de un sueño".

"Frente a una sociedad tan castigada como la nuestra en cuanto al incumplimiento de promesas, con tanto escepticismo y tanto descreimiento, este día que culmina exitosamente, es algo más que el valor académico, es una muestra de que podemos hacer las cosas y las podemos hacer bien", afirmó Fernández.

"Tienen que ver con una identidad muy importante de la condición humana -continuó-, la de reconocer en el otro la imagen de cada uno de nosotros"

"Hemos podido cumplir, no solamente quien habla, sino hombres de distintos partidos políticos como el intendente de Rosario, (el socialista Miguel) Lifschitz, el gobierno de Santa Fe (en manos del PJ) y distintos funcionarios que pudimos cumplir con el compromiso de hacer este Congreso", insistió. La primera dama agregó: "Cuando nos ponemos objetivos y trabajamos todos juntos para el mismo lado podemos hacer las cosas bien".