El Senado le dio media sanción a un proyecto que establece un beneficio extraordinario para quienes hayan estado exiliados por razones políticas entre el 6 de noviembre de 1974 y el 10 de diciembre de 1983, así como para sus hijos nacidos en Argentina o en el exterior.
El proyecto, impulsado por el justicialista salteño Marcelo López Arias, y que fue girado a la Cámara de Diputados, establece una suma por día de exilio para aquellos ciudadanos argentinos nativos o por opción y los extranjeros con residencia en territorio nacional que hayan estado exiliados por razones políticas.
El beneficio alcanza también a los familiares de los exiliados políticos que hayan fallecido y a los menores de edad, que en razón de la persecución política de sus padres debieron permanecer forzosamente fuera del país.
Para acceder a la ley, que ahora deberá tratar la Cámara baja, los exiliados políticos deberán acreditar su condición ante la Secretaría de Derechos Humanos, que en un plazo máximo de 120 días deberá decidir el otorgamiento del beneficio.
Según la ley que votó por unanimidad la Cámara alta, los exiliados políticos recibirán alrededor de 75 pesos por cada día que debieron exiliarse. Así, un exiliado político que debió dejar el país durante cinco años recibirá entren 150 mil y 200 mil pesos, según calculó el jefe de la comisión de Presupuesto y Hacienda, Jorge Capitanich (PJ-Chaco).
Una vez que los beneficiarios presenten la solicitud -y se la concedan-, renunciarán automáticamente a cualquier otra indemnización por el mismo concepto, según la norma impulsada por el senador justicialista Marcelo López Arias.
Al defender el proyecto, Capitanich sostuvo que "se trata de un capítulo que le falta a la política de derechos humanos", y destacó que es "un merecido reconocimiento para quienes han vivido las secuelas del odio y la persecución".
El proyecto establece que el beneficio será igual a la treintava parte de la remuneración mensual de los agentes Nivel A de escalafón para el personal civil de la administración pública nacional, por cada día que duró el exilio.
El pago del beneficio "implicará la renuncia a todo derecho por indemnización de daños y perjuicios en razón de exilio y es excluyente de toda otra indemnización por el mismo concepto".
El proyecto fue respaldado por el titular del bloque de senadores radicales Mario Losada, quien destacó la importancia del proyecto, al sostener que es "una vieja reivindicación" y anticipó el voto favorable de la bancada de la UCR a la iniciativa.
En tanto, el senador del Partido Socialista, Rubén Giustiniani, aseveró que "memoria, verdad y justicia son elementos indispensables de una política de derechos humanos" y consideró "muy coherente avanzar después de la tragedia que le tocó vivir a los países del Cono Sur".
