El Senado postergó nuevamente el tratamiento del proyecto para convertir la actual tasa del 18,5 por ciento aplicada al precio del gasoil en un impuesto cuya alícuota podría alcanzar hasta el 20,2 por ciento de ese monto, que intentará ahora aprobar la próxima semana.
Si bien la voluntad del oficialismo era tratar ayer esa iniciativa -que ya tiene sanción de Diputados-, fuentes parlamentarias admitieron que el PJ no reunía el número necesario para aprobarla, dado que se requiere una mayoría calificada de 37 votos positivos. La propuesta de llevar a la semana próxima el tratamiento del proyecto fue presentada por el mismo titular del bloque de senadores del justicialismo, Miguel Angel Pichetto, quien pidió la postergación "para conversarlo y tener más precisión sobre un tema tan importante".
El proyecto es rechazado por el radicalismo bajo el argumento de que su aprobación disparará un aumento inmediato del precio final del gasoil, aún cuando el justicialismo ofreció incorporar un artículo para que el Ejecutivo adopte medidas tendientes a evitarlo.
Sin embargo, no sólo los senadores de la UCR plantearon su desacuerdo sino que además hay varios justicialistas que no aceptan un aumento de la alícuota del gasoil, como los pampeanos Rubén Marín y Silvia Gallego, el santafesino Carlos Reutemann y la titular de la comisión de Agricultura, Elva Paz, según comentaron fuentes del PJ.
Estos legisladores parecen sensibles a los reparos planteados por los dirigentes de las organizaciones del campo, como la Sociedad Rural Argentina, quienes advirtieron que el agro es el principal consumidor de gasoil del país y que un aumento de la alícuota implicará incrementar los costos productivos del sector en unos 80 millones de pesos anuales.
Por ese motivo, el justicialismo procurará en los próximos días ordenar su frente interno para asegurarse los votos de la propia bancada o cerrar un acuerdo con la oposición.
