La Cámara de Diputados tratará esta semana el Acta de Entendimiento suscripta entre la distribuidora Edelap y el Gobierno, en una sesión que promete un fuerte debate entre el justicialismo y la oposición sobre las renegociaciones que se realizan con las empresas de servicios públicos privatizados.
La ratificación del Acta de Entendimiento es clave para el Gobierno porque se trata de una renegociación considerada "testigo", ya que allí están contenidas las cláusulas que el Ejecutivo aspira a incorporar en el resto de los acuerdos que se alcancen con las empresas del sector eléctrico.
Los ejes centrales del acuerdo, ya ratificado por la Cámara de Senadores, contemplan un aumento del 15 por ciento en las tarifas de comercios y empresas a partir de mayo, pero sin afectar el precio final a los usuarios residenciales.
En cambio, establece que una revisión integral del cuadro tarifario deberá estar definida en junio por el Ente Nacional de Regulación Eléctrica, el cual deberá aplicarla desde febrero del 2006, además de estipular la suspensión de las demandas ante el CIADI, el tribunal arbitral del Banco Mundial.
De hecho, el gobierno está encarando una dura negociación con las grandes distribuidoras de energía, Edenor y Edesur, que hasta ahora no aceptan las propuestas de las autoridades nacionales según lo expresaron en la audiencia pública que se efectuó el pasado miércoles.
En este marco, la discusión en el recinto de sesiones no sólo estará centrada en el convenio con la firma Edelap, sino que la mirada estará puesta en la renegociación con las grandes distribuidoras metropolitanas tanto del sector eléctrico como energético.