La líder del ARI, Elisa Carrió, lanzó la campaña nacional de su partido con un mensaje centrado en la "dignidad humana", sin mayores menciones a sus rivales electorales y apelando a la conciencia individual y colectiva para consolidar un proyecto nacional.
Carrió centró su mensaje en la importancia de recuperar la "dignidad" ante el clientelismo y la prebenda de los políticos tradicionales.
El acto del ARI, el cuarto que tiene como escenario al Teatro Coliseo de Barrio Norte, presentó a los candidatos a diputados nacionales de casi todas las provincias con un video en el que transmitían un concepto, de corte político, social y ecológico, como tópicos centrales. Luego, los mismos candidatos con el resto de los dirigentes del ARI se ubicaron en sillas naranjas bajo un gran cartel que rezaba: "Propuestas para un contrato moral".
La candidata a senadora por la provincia de Buenos Aires, Marta Maffei, fue la primera oradora y fue por lejos la más dura en el panel de oradores del ARI. La gremialista docente llamó "inepto" al gobernador bonaerense Felipe Solá y lo juzgó como "un hombre absolutamente alineado a los peores procesos de la Argentina" y nombró los cargos que desempeñó junto a Carlos Menem, Carlos Ruckauf, Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner.
El radical disidente y candidato a legislador Enrique Olivera prefirió un discurso más conciliador, cargado de halagos para Carrió del tipo "la dirigente más talentosa de la Argentina" o "la próxima presidente de los argentinos" y entró de lleno en la campaña al mencionar la tragedia de Cromañón.
"Lamento mucho que hayan dado marcha atrás con el descentralización de las inspecciones en la Ciudad que hice en el 2000 porque ahora sabríamos quién fue el inspector que no fue a Cromañón o que no hizo lo que debía", especuló el ex funcionario delarruista.
