La candidata a senadora nacional por el PJ bonaerense, Hilda "Chiche" de Duhalde descalificó las acusaciones del presidente Néstor Kirchner sobre un supuesto pacto de "desestabilización" con el menemismo y sostuvo que en nombre de "la nueva política", han convertido la campaña en "un chiquero".
"Quiero que quede claro: nosotros no hicimos alianza con Menem. Ustedes saben, yo con Menem no voy ni a la esquina, tenemos diferencias enormes desde hace muchos años", enfatizó "Chiche" durante el discurso de lanzamiento de campaña que realizó en el polideportivo de Gimnasia y Esgrima La Plata.
Además, Chiche criticó al gobierno, a los piqueteros, reivindicó a la Iglesia y a las Fuerzas Armadas y a su marido Eduardo Duhalde, que no asistió al mitin.
En otro tramo dijo que buscará que la provincia recupere puntos de la coparticipación y prometió que promoverá iniciativas para que bajen las retenciones agropecuarias.
Chiche estuvo acompañada por José María Díaz Bancalari, Jorge Villaverde, el titular de la Cámara de Diputados, Eduardo Camaño, y la vicegobernadora Graciela Gianettasio, varios legisladores e intendentes.
La candidata a senadora ocupó la mitad de su discurso en rechazar las denuncia del gobierno sobre un pacto desestabilizador que involucraba al duhaldismo, a Menem, a Patti y algunos sectores piqueteros. "Quiero aclarar que no hicimos ningún acuerdo con Menem. Yo con Menem no voy ni a la esquina", dijo Chiche, apenas inició su discurso en el acto de lanzamiento de su candidatura en el estadio cubierto de Gimnasia y Esgrima La Plata.
En ese sentido agregó que "cuando se habla de ese pacto de desestabilización quiero decirles que entre lo sublime y lo ridículo hay un paso muy cortito, porque es rídiculo vincularnos con Menem que ha sido nuestro principal adversario en los últimos años".
La candidata a senadora también negó cualquier vinculación con nucleamientos de desocupados. "Es ridículo que quieran ligarnos con los piqueteros porque es el gobierno el que tiene piqueteros en la lista" de candidatos para las elecciones de octubre, dijo.
En este punto, Chiche volvió a diferenciarse de los sectores piqueteros al afirmar que "no me enredo en discusiones entre lo nuevo y lo viejo, pobres de nosotros si lo nuevo son los dirigentes piqueteros, si lo nuevo es la violencia, la agresión, la capucha, los palos, pobres de nosotros", apuntó.
Luego Chiche negó que su marido Eduardo Duhalde "haya dejado un país en llamas" y buscó meter una cuña en el gobierno. "Voy a perder poco tiempo hablando del pasado, porque cuando el presidente dice que le dejaron un país en llamas, no dice la verdad y la verdad es que quien representa el símbolo de la recuperación económica de la argentina tiene nombre y apellido, es Roberto Lavagna", fue la frase que eligió para resaltar la figura del único ministro que no se ha involucrado en la campaña electoral.
Más tarde, Chiche dijo "estar preocupada" por "la calidad de las instituciones, cuando se agrede a la Iglesia y a las Fuerzas Armadas, más allá de justos cuestionamientos a algunos integrantes de los aberrantes acontecimientos de los derechos humanos, porque son instituciones fundame6ntales de la República Argentina".
Otro tramo de su discurso estuvo marcado por los reclamos que le hará al gobierno si llega a ocupar una banca en el Senado, y allí planteó que pugnará porque aumenten la coparticipación federal, y para que se reduzcan las retenciones al sector agropecuario.
"Voy al Senado para que nos devuelvan la plata que nos quitaron y nos prometieron en campaña que nos iban a devolver, pero han pasado dos años y medio, y aun no ha pasado nada", apuntó la dirigente del justicialismo bonaerense.