La Legislatura porteña rechazó pedido del jefe de gobierno Aníbal Ibarra en el que insistía en recusar a seis legisladores que integran la Comisión Investigadora de la Sala Acusadora en el trámite del pedido de juicio político al titular del Ejecutivo por el caso Cromañón.
De esta forma, la Sala Acusadora insistió en avalar la tarea de los diputados, quienes ya habían sido objetados formalmente por Ibarra y ratificados por el plenario.
Los diputados que quiso recusar Ibarra son los macristas Martín Borrelli y Alvaro González, el ex funcionario ibarrista Ariel Schifrin, el ex zamorista Rubén Devoto, el lopezmurphysta Jorge San Martino y Jorge Enríquez.
Enríquez implicó un caso especial porque Ibarra lo recusó por dos cuestiones distintas y la Sala Acusadora tuvo que votar dos veces su situación, una con los otros cinco legisladores, y otra en particular, aunque el resultado fue el mismo.
La sesión se realizó en medio de acusaciones de padres de víctimas del incendio ocurrido en el boliche del barrio de Once el pasado 30 de diciembre de 2004.
El episodio se produjo por la mañana durante la reunión semanal de la comisión de Acusación del Consejo donde tramitan diversos pedidos de juicio político contra los jueces de la Cámara del Crimen Gustavo Bruzzone y María Laura Garrigós de Rébori.
Esos jueces son los que a principios de mayo dispusieron la libertad del gerenciador de República Cromañón por considerar que no existía peligro de que se diese a la fuga pese a encontrarse procesado por su responsabilidad en la muerte de 194 personas.
Quien mayores insultos recibió durante la reunión fue el consejero Beinusz Szmukler quien ya presentó en la comisión un dictamen sugiriendo el cierre de los pedidos de juicio político.
"Sos una basura de persona", le gritaron los familiares quienes sólo se limitaron a proferir insultos ya que no agredieron físicamente a ninguno de los consejeros.
El padre de uno de los jóvenes fallecidos en la tragedia Ricardo Righi acusó a los miembros del Consejo de "no estar cumpliendo con sus tareas" y les recordó que "cobran un sueldo y no están haciendo lo que corresponde".
Righi, denunció que el trámite legislativo "es una farsa y sabemos que no vamos a contar con los 30 votos" necesarios para que avance el juicio político a Ibarra "porque todo está ya armado y esto es gravísimo". Dijo también que "hoy en el Consejo de la Magistratura, al no hacer lugar a pruebas determinadas que hemos presentado sobre irregularidades de la Cámara del Crimen, indica que ninguno de los tres poderes está funcionando como corresponde".