El proyecto de ley para modificar el Consejo de la Magistratura no logró obtener dictamen de las comisiones de Asuntos Constitucionales y Justicia y Asuntos Penales, en una extensa reunión que giró en la necesidad de acortar o no el número de los representantes del Congreso en el cuerpo que fiscaliza a la Justicia.
El proyecto enviado por el Poder Ejecutivo en mayo del año pasado propone una reforma integral del cuerpo creado tras la modificación de la Constitución Nacional en 1994 y, entre otros puntos, reduce de 20 a 12 los miembros del Consejo, anulando la representación del Congreso Nacional y excluyendo de su conformación al presidente de la Corte Suprema de Justicia.
En cuanto a la representación legislativa, el proyecto del Ejecutivo establece que esos lugares estarán ocupados por tres juristas por concurso, dos por Diputados y uno por el Senado.
La comisión presidida por Cristina Fernández de Kirchner presentó un proyecto de dictamen en el cual, si bien se acorta el número de miembros, se mantiene la representación legislativa en manos de senadores y diputados. Actualmente, el Congreso tiene cuatro representantes por cada cámara: dos por la mayoría, uno por la primera minoría y otro por la segunda minoría.
Con la reducción del número de miembros se pasaría de 20 a 13, excluyendo también al presidente de la Corte Suprema de Justicia. De ese modo, los integrantes del Consejo serían: tres miembros de cada cámara (dos por la mayoría y uno por la primer minoría); tres magistrados; dos representantes de los colegios de abogados; uno por el Poder Ejecutivo y uno por el ámbito científico y académico.
El dictamen fue defendido por la presidenta de la Comisión de Asuntos Constitucionales y por el titular del bloque justicialista, pero criticado por el radicalismo.
El jefe de la bancada del oficialismo, el rionegrino Miguel Angel Pichetto, consideró que el Consejo de la Magistratura parecía "una asamblea popular" por el sobredimensionamiento de la cantidad de sus miembros y que la figura del presidente de la Corte en su seno "era innecesaria porque en la práctica participa poco".
"El concepto de equilibrio no quiere decir igualdad de partes, sino quienes tengan representación. Los miembros de la segunda minoría suelen actuar con una postura contestataria o de oponerse a todo", sentenció Pichetto. En cambio, el futuro presidente del bloque radical, el mendocino Ernesto Sanz, defendió la presencia de cuatro miembros de cada cámara al decir que "estamos ante un organismo en el que debemos preservar la absoluta independencia del poder político".