– La iniciativa obliga a toda persona mayor de 18 a donar sus órganos y tejidos salvo que aclare en forma expresa su negativa.

– En caso de que el fallecido sea menor de edad, sólo los padres o tutores legales podrán aprobar la donación de órganos del menor.

– Las personas que no quieran donar los órganos podrán enviar una carta documento gratuita por el Correo Argentino al INCUCAI dejando constancia de su negativa. También se podrá dejar expresado en cualquier Registro Civil.

– Si no hay oposición expresa de la persona fallecida, la responsabilidad de donar sus órganos quedará en manos de sus familiares consanguíneos hasta el cuarto grado. Es decir, la primera palabra la tendrá el cónyuge, luego los hijos, después los padres y por último los hermanos mayores de edad.

– En caso de muerte violenta, y ausencia de sus familiares, la autoridad competente adoptará los recaudos tendientes a ubicar a los parientes para que manifiesten la voluntad de la persona fallecida.

– El misterio de Salud tendrá la obligación de llevar adelante una intensa campaña de publicidad para informar sobre el carácter voluntario y solidario de la donación de órganos.

– La ley recién entrará en vigencia luego de la campaña de publicidad sobre las ventajas de donar los órganos que deberá llevar adelante el Gobierno.