La decimotercera edición de los Premios Parlamentario tuvo en el escalón más alto a dos hombres que ya ganaron en otras oportunidades la máxima distinción: el senador Jorge Capitanich y el diputado Héctor Polino.
Existe una forma infalible de medir el trabajo legislativo? Sin duda la respuesta es no. No hay una manera certera de evaluar cuánto trabaja un legislador ni cuánto empeño pone en lo que hace.
Sin embargo, existen intentos de acercarse a conocer el desempeño de cada uno. Podrá considerarse su presencia mediática; la asistencia a las sesiones; su trabajo en comisión; la cantidad de proyectos presentados. Cada cosa no puede analizarse en forma independiente, sino que se trata de un todo.
Este semanario promueve distintos mecanismos para intentar evaluar -de diferentes formas- dicho trabajo. Uno de ellos -cuantitativo- es contar la cantidad de leyes que cada legislador presenta; el otro -cualitativo- son los Premios Parlamentario.
Y si bien en este último caso caben las generales de la ley en aquello de que los premios son inexorablemente subjetivos, valen como elemento de valor a la hora de calificar el trabajo legislativo. Porque si los propios legisladores, empleados del Congreso y periodistas especializados son los que se encargan de votar por los mejores, cuanto mayor sea la participación en la encuesta, más fidedignos serán los resultados.
Cuadro de honor
En este caso, los ganadores absolutos de la edición 2005 de los Premios Parlamentario fueron dos legisladores que ya conocen la dicha de haber estado en ese sitial. Uno va por su segundo premio, el otro para ponerle un broche de oro a su dilatada trayectoria legislativa a la que acaba de poner fin, al menos por dos años.
Con 139 votos, el primero en la lista de diputados es el multipremiado diputado socialista Héctor Polino. El legislador ya había sido el máximo galardonado en los años 1995 y 1999, y tiene el honor de haber estado en el cuadro de honor de todas las entregas de estas distinciones, desde 1994. El mérito de Polino es doble, debido a que llega a ocupar este puesto sin ser miembro de ninguno de los bloques mayoritarios, lo cual demuestra que sus pares no lo eligieron por amiguismo, sino porque realmente ponderan su trabajo legislativo. De esta manera, Polino se despide de la Cámara baja con un nuevo premio bajo el brazo.
En la Cámara alta, el ganador también arrasó por una amplia diferencia de votos. Con 184 sufragios -su escolta alcanzó 149- resultó en primer lugar el justicialista Jorge Milton Capitanich quien -de esta manera- recibe el máximo galardón por segunda vez, por cuanto ya lo había alcanzado en 2003.
Capitanich es un hombre clave a la hora de sancionar las leyes que pide el Poder Ejecutivo. Como presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, en general responde como miembro informante de los temas más salientes y es el que gestiona los trámites parlamentarios. Además muestra ductilidad para trabajar en temas de todo tipo. Seguramente estas y otras razones hicieron que el legislador resultara electo como el más laborioso.
En el caso del Senado, el segundo premio fue para el radical mendocino Ernesto Sanz, quien al igual que Capitanich se encargó de ser el pivote de su bloque en los temas más salientes. De hecho, al finalizar el último período ordinario -y con la ida del misionero Mario Losada- Sanz quedó con la presidencia del bloque, en una decisión casi unánime de sus compañeros de bancada. Sanz obtuvo 149 votos en la edición de este año de los premios. Y doble mérito también en su caso representa el hecho de que esta es la segunda vez consecutiva que se ubica en el segundo lugar en el Senado.
En Diputados, el segundo puesto fue para otra multipremiada: la diputada Graciela Camaño, ganadora el año pasado del premio principal, así como también lo había hecho en el año 2000. La legisladora fue secretaria Parlamentaria del bloque oficialista durante el año pasado, y finalmente renunció a ese puesto luego de la ruptura entre Duhalde y Kirchner. Ahora tendrá un rol fundamental en el nuevo bloque del Peronismo Federal.
En el Senado
Siguiendo con la recorrida, en tercer lugar quedó el ganador del premio principal en el Senado el año pasado y jefe del bloque justicialista, Miguel Angel Pichetto, quien recibió 124 votos, con lo que se le reconoce su difícil tarea de representar al Poder Ejecutivo dentro de la Cámara. Con el agregado de que -como jefe- tiene una fuerte figura de peso que le hace sombra, como es la primera ciudadana, que esta vez no integra la lista de premiados.
En cuarto lugar -con 99 votos- quedó la justicialista salteña Sonia Escudero, reconocida por sus pares por dos trabajos fundamentales: por un lado el haber defendido enérgicamente durante estos años a la estabilidad de la Corte Suprema de Justicia; por el otro por su trabajo en temas vinculados al terrorismo y al narcotráfico. Sonia Escudero ya fue premio Parlamentario en el año 2002.
El quinto puesto fue compartido entre dos legisladores de distintas bancadas. El socialista Rubén Giustiniani y el radical Gerardo Morales, dos jóvenes representantes de este Cuerpo que por cierto no pasan desapercibidos en el mismo.
Séptimo resultó quien por primera vez se ubica entre los diez primeros, el representante del Radicalismo Independiente Rodolfo Terragno, de quien todos reconocen su solidez intelectual y el planteamiento teórico que realiza frente a cada uno de los temas.
Octava aparece otra debutante en estas lides -hablamos de ubicarse en el top ten- la senadora María Cristina Perceval, quien tiene la difícil tarea de ser la primera mujer que preside la Comisión de Defensa en la Cámara alta. Un dato acorde con la presencia de otra mujer al frente de esa cartera.
Tres votos y un escalón más abajo figura otra dama, la senadora chaqueña Mirian Curletti. Convertida en la primera mujer en ocupar una de las vicepresidencias del Cuerpo, esta legisladora radical es reconocida por todos como “una máquina de presentar proyectos”, y prueba de ello es que desde hace años es quien más iniciativas de ley presenta a lo largo del año.
Cierran el cuadro de los diez mejor ubicados dos senadores. Uno saliente, el hasta el 9 de diciembre presidente del bloque radical y otrora presidente provisional del Senado, Mario Losada, y el representante del Partido Renovador de Salta Ricardo Gómez Diez, quien desde un partido provincial ha logrado el respeto de todos quienes están interiorizados en la tarea legislativa.
En la otra Cámara
En Diputados el tercer lugar fue para la principal ganadora en las ediciones 2002 y 2003, Margarita Stolbizer. La legisladora radical, quien finalizó su mandato el último diez de diciembre, es una de las caras nuevas de su partido y hoy es una de las máximas autoridades del mismo. Stolbizer -que obtuvo 96 votos- se transformó en una de las voces más escuchadas del recinto a la hora de enfrentar las acciones -o inacciones del Ejecutivo-.
Continuando con el esquema, quedó cuarto el diputado justicialista Jorge Argüello, quien se alzara con el premio principal en una de las primeras ediciones, la de 1994. Argüello tuvo un 2005 bastante ajetreado, por cuanto siguió presidiendo la estratégica Comisión de Relaciones Exteriores, en tanto que también integró el cuarteto de conducción que dirigió el bloque oficialista luego del desplazamiento de José María Diaz Bancalari.
El quinto puesto es ocupado por el jefe de la bancada del ARI, Eduardo Macaluse. Con 77 votos, este ex docente fue reconocido por todos los sectores por su trabajo en representación del partido de Elisa Carrió. La buena labor de este legislador hizo que incluso con el retorno de su jefa a la Cámara baja todos los representantes del ARI lo mantuvieran en su puesto.
El sexto lugar corresponde a otro de los que por primera vez se ubica entre los diez primeros puestos, con toda justicia por cierto. El titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Carlos Snopek, quien fuera reelecto este mismo año como diputado nacional.
El séptimo puesto fue para Roberto Basualdo, un empresario “justicialista independiente”, que en pocos años logró un gran respaldo de sus comprovincianos que ahora le dieron el honor de ser senador de la Nación. Este premio probablemente sea un galardón por su labor frente de la Comisión de Comercio, una de las que más trabajo cuantitativamente durante 2005. Es además uno de los que más proyectos presentó a lo largo del año.
Octavo lugar y con 57 votos se ubicó Jorge Vanossi. Este ex radical y actual diputado del PRO es reconocido por su manejo de los temas jurídicos y supo ser el primer ganador del principal Premio Parlamentario en la edición inicial de estos galardones, en 1992.
Sigue en la lista el diputado de Dignidad y Justicia y economista de la CTA, Claudio Lozano, quien pese a no poder imponer sus proyectos es visto con admiración por todos los que circulan por los pasillos del Congreso. Lozano ya había sido mencionado el año pasado y obtuvo esta vez 53 votos.
Cierra la lista el diputado bonaerense Alfredo Atanasof, quien igual que el año pasado alcanza un lugar entre los diez más destacados de la Cámara baja.
La labor de los medios
Una vez más los premios también alcanzaron a los representantes de la prensa que cubren la labor legislativa. Y en este caso se produjo un hecho inédito, al perder por primera vez Crónica TV el liderazgo en cuanto a la mejor cobertura televisiva de la actividad legislativa. La señal Todo Noticias fue la responsable de que el canal de la placa roja no ganara por séptima vez consecutiva el premio principal, imponiéndose en un final cabeza a cabeza por 39 votos contra 37 que logró Crónica TV.
En el rubro cronista parlamentario televisivo, también el representante de Crónica TV quedó en segundo lugar. Raúl Zapata logró 17 votos, dos menos que el ganador en este rubro, Fernando Fraquelli, de Canal 7.
En el rubro radial, el ganador resultó Radio Continental (24 votos) que compitió palmo a palmo con Mitre a quien venció por apenas 5 votos, en un electrizante sprint final, y luego de liderar la encuesta la emisora de la calle Mansilla durante casi todo el escrutinio.
A la hora de elegir al mejor periodista radial en temas legislativos, se impuso el hombre de Radio Mitre Horacio Caride, con 18 votos, quien desplazó al ganador de la última edición, Juan Domingo Candal (Radio Nacional), que esta vez quedó segundo.
En el rubro “mejor cobertura para medios del interior”, la ganadora fue Claudia Bordignon, de Radio Provincia, quien con 16 votos desplazó al segundo lugar a Carlos Mariscal quien transmite para LT 8 de Rosario y había sido el ganador en este rubro el año pasado.
En lo que hace a periodismo gráfico, este suele ser otro de los rubros más peleados, aunque este año ganó muy holgadamente el diario La Nación, con 63 puntos, en tanto que Clarín reunió apenas 19 votos.
En cuanto al periodista gráfico más destacado, también correspondió al diario de los Mitre: Gustavo Ybarra, quien con 27 votos alcanzó por primera vez la principal distinción. Segundo, con 14 votos, se ubicó el representante de Clarín Alfredo Gutiérrez.
Cabe destacar que una vez más los productos y periodistas de Parlamentario recogieron innumerable cantidad de votos, cuya cantidad -obviamente- no será transcripta, fiel a la costumbre de esta publicación.
Vaya un saludo desde estas páginas a todos los ganadores en cada rubro, y el aliento para que sigan tratando de hacer resaltar la tarea legislativa personal, que a la postre redunda en beneficio del bien común.