La Sala Juzgadora de la Legislatura porteña que decidirá en el juicio político al suspendido jefe de gobierno Aníbal Ibarra, rechazó por 10 votos contra 4 abstenciones, el pedido de recusación al diputado zamorista Gerardo Romagnoli, presentado por el jefe del Ejecutivo acusándolo de "prejuzgamiento".
La Sala también desechó la declaración testimonial del empresario Omar Chabán propuesta por los fiscales de la causa Jorge Enríquez, Jorge San Martino y Rubén Devoto.
Tras la votación, el defensor de Ibarra, Julio César Strassera, dirigiéndose al presidente de la Sala, Julio Maier, dijo con ironía: "Hagamos más corto el juicio y condenémoslo ahora a Ibarra". Maier le pidió "compostura" como antes le había solicitado a los familiares.
El apartamiento del zamorista Romagnoli del juicio político fue reclamado por Ibarra al considerar que incurrió en un "prejuzgamiento", pero fue rechazado por 10 votos, 4 abstenciones y un ausente, y se complicó el panorama del mandatario.
Entre los votos contrarios a Ibarra estuvo el del propio Romagnoli, quien había sido habilitado el martes, pese a los gestos ampulosos de uno de los defensores del jefe de Gobierno, Julio César Strassera.
La resolución legislativa fue un nuevo revés para Ibarra, que tenía la esperanza de que Romagnoli, quien se presume votará por la destitución, fuera reemplazado por una legisladora afín, la socialista Verónica Gómez.
La votación, que llamó la atención por la contundencia, se realizó tras cuatro horas de debate en las que nuevamente quedaron en evidencia las dificultades que tiene la Sala para avanzar en el proceso. No obstante, la sesión abrió otro frente para los juzgadores, ya que el legislador Héctor Bidonde señaló que al igual que Romagnoli había hablado en numerosas ocasiones en contra de Ibarra y consideró que eso no representaba causal de recusación.
Acto seguido, la defensa de Ibarra anunció que analizará el pedido de recusación contra Bidonde.
Pese a que él mismo había convocado la audiencia, Ibarra desistió de concurrir a la Legislatura y mandó en su representación a los abogados Strassera y Julio Golodny, quienes quedaron formalmente a cargo de la defensa.
Durante la sesión se produjo un pico de tensión cuando el juez Julio Maier, titular de la Sala y moderador del debate, reclamó que el centenar de familiares de víctimas de la tragedia de República Cromañón que estaba presente se mantuviera en silencio y bajara las pancartas y fotos que suele mostrar.
Tras resolver esa cuestión, gracias a la colaboración de los familiares que aceptaron la solicitud, la Sala volvió a enfrascarse en otro debate independiente a la cuestión de fondo. Sucedió que Ibarra pidió la postergación de la audiencia basado en dos puntos: uno era la ausencia del diputado Norberto La Porta, quien fue operado el lunes pasado, y el otro porque esta misma tarde presentó una ampliación de la recusación contra Romagnoli.
El primer planteo fue rechazado al considerarse que la Constitución de la Ciudad señala explícitamente que no hace falta la presencia de todos los miembros de la Sala Juzgadora para sesionar, sino los dos tercios del cuerpo.
El segundo también fue desestimado a través de una votación, luego de que el propio Romagnoli desistiera de hacer uso de los tres días que le ofrecía la defensa de Ibarra para defenderse de las nuevas acusaciones.
A Romagnoli, los defensores de Ibarra lo acusaban de haber prejuzgado cuando formuló su discurso de asunción en la Legislatura el 10 de diciembre pasado y trazó una especie de paralelo entre el mandatario y el ex comisario Alfredo Fanchiotti, acusado de matar a Maximiliano Kosteki y Darío Santillán.
Sin embargo, Strassera y Golodny hicieron llegar este miércoles un escrito a los miembros de la Sala en el que adjuntaron declaraciones de Romagnoli a distintos medios periodísticos y también la versión taquigráfica completa de aquel discurso.
Fuentes cercanas al ex fiscal señalaron que en la versión taquigráfica, el diputado no sólo "comparó a Ibarra con el comisario Alfredo Fanchiotti, sino que remarcó que sin duda es responsable de lo que pasó en Cromañón".
Los voceros apuntaron que esa última frase no fue dicha por Romagnoli, aunque indicaron que el legislador la tenía escrita en su discurso y pidió que fuera incluida en la "versión taquigráfica", por lo cual permite ampliar la recusación.