Radicales, aristas y macristas rechazaron el pago de la deuda al FMI porque deja "desguarnecido" al Banco Central para hacer frente a una crisis inflacionaria, mientras que el socialista Hermes Binner respaldó la decisión del Gobierno.
Los opositores que cuestionan la política de "desendeudamiento" subrayaron, además, que "era innecesario" cancelar toda la deuda, porque, mientras se realizaran los pagos de los vencimientos, el organismo "no podría imponer condiciones" al país.
Binner, contra lo que plantearon la mayoría de los opositores, sostuvo -tal como lo hizo el Gobierno- que el pago de la deuda es "un acto de soberanía".
Binner sostuvo también que hay algunas actitudes del oficialismo que le generan "preocupación" y remarcó que en la Argentina "el Presidente además de ejercer el presidencialismo utiliza absolutamente todos los recursos para incrementarlo".
El diputado nacional subrayó que el bloque socialista, a diferencia de otros partidos de la oposición, apoyó "la mayoría de los últimos proyectos impulsados por el Ejecutivo", a excepción principalmente de la polémica reforma del órgano que supervisa a la Justicia.
"Nosotros apoyamos esta ley en el Congreso. No es más que un acto de estricta soberanía, como dijo (Raúl) Scalabrini Ortiz cuando se nacionalizaron los ferrocarriles", definió Binner en diálogo con la agencia Noticias Argentinas.
Pero la jefa del ARI y diputada nacional Elisa Carrió calificó como "un inmenso error" la decisión del Gobierno y advirtió incluso que "puede traer consecuencias muy difíciles para el país".
"Se trata de una acto innecesario de disponibilidad de todas las reservas que son las que respaldan la base monetaria y, además, esas reservas eran las que nos permitían en los próximos dos o tres años hacer frente a cualquier crisis inflacionaria interna a cualquier golpe de mercado o a una crisis internacional", precisó Carrió.
En tanto, el ex diputado Mario Cafiero envió un comunicado al Gobierno en el cual reclamaba que se suspenda el pago de las sumas reclamadas por el FMI, "hasta tanto la Justicia Federal no se expida sobre la ilegitimada e ilicitud de tales reclamos". Esta acción se realizó en el marco del Recurso de Amparo iniciado el 28 de diciembre pasado, firmado y presentado por unos 50 representantes de distintas entidades sociales, religiosas, sindicales y de derechos humanos.
El bloque radical formuló su crítica en un comunicado en el que opinó que "hipotecamos una parte de nuestro país porque los males de hoy no pueden esperar a mañana. Justo cuando el Fondo condona otras deudas que cómo la boliviana, son tan ilegítimas como la nuestra, justo cuando arrecian las críticas en el mundo sobre el papel y la responsabilidad del organismo en las crisis de los países no desarrollados".
Por su parte, el titular de la UCR y diputado nacional, Roberto Iglesias, comparó el pago al FMI con la toma de las Islas Malvinas impulsada por la dictadura en 1982, porque "ambas acciones no beneficiaron al pueblo".
"Se la presentó como una medida soberana, pero se parece mucho a la toma de Malvinas en 1982, porque por más que fuera un reclamo justo, nos metió en una guerra. Y el pago al FMI no beneficia a la gente porque no había necesidad de cancelar la deuda", dijo Iglesias.
El coordinador del Interbloque Propuesta Federal -macristas y partidos provinciales-, el diputado Federico Pinedo, consideró que "se ha dejado en situación de gran debilidad al Banco Central para defender el valor de la moneda".
"Además, se ha dado un mensaje de que la autonomía del Banco Central no está garantizada porque el Gobierno puede meterle la mano en el bolsillo cuando quiera", agregó Pinedo.