El ex presidente Eduardo Duhalde aseguró hoy que "nunca" tuvo una relación de "amistad" con Néstor Kirchner, pero aclaró que viviría como "un fracaso propio" si al primer mandatario le va mal, teniendo en cuenta que lo apoyó para que llegara a la primera magistratura.
"Nunca tuve una amistad", aclaró en forma tajante Duhalde al ser consultado sobre su relación con Kirchner, con quien estuvo enfrentado meses atrás a través de las candidaturas de sus esposas como senadoras en la provincia de Buenos Aires.
"Yo tuve muy pocas amistades políticas, las amistades mías están vinculadas con mi niñez y juventud y uno después tiene nuevas personas con las que se relaciona con más o menos afecto, y yo siempre dije que cuando se termina la carrera política de un dirigente amigos de esa etapa quedan muy pocos", añadió el ex jefe de Estado en declaraciones radiales formuladas desde San Pablo, Brasil.
Duhalde sostuvo que hace tres años apoyó a Kirchner como candidato a la presidente porque "era el único nuevo" de los postulantes justicialistas, y la ciudadanía apuntaba a la renovación de la vieja política, que en el caso del PJ encarnaban los candidatos Adolfo Rodríguez Saá y Carlos Menem.
Sobre Kirchner, dijo: "no hubo nunca una relación amistosa, una buena relación. Era el único nuevo de los tres candidatos y mi obligación, si ponía los oídos en lo que la gente quería, era ayudar a quienes aparecían como lo nuevo", abundó.
Al haber apadrinado sus inicios y por haber sido su sucesor en el cargo, Duhalde aclaró que el entiende que "su fracaso (el de Kirchner) sería mi fracaso".
Con respecto a los temas de actualidad que movilizan al Gobierno, Duhalde estimó que "se ha manejado prudentemente" el asesinato de un policía en la localidad de Las Heras, Santa Cruz, en el marco de una protesta gremial del sector de los petroleros.
"En la medida que la Argentina comienza su crecimiento hay una pugna del sector del trabajo por tener una participación de su crecimiento", estimó Duhalde, quien aclaró que "lo riesgoso es pretender repartir el ingreso que no se crea".
Para el ex presidente estos procesos "son largos y exceden al Presidente", sino que se trata de un camino en el cual "varios" mandatarios "van siguiendo la misma huella", y calculó que deberá pasar "más de una década para que podamos estar realmente aliviados".