La Legislatura porteña aprobó por unanimidad de 35 votos la ley que declara la Emergencia Ambiental de la cuenca Matanza-Riachuelo durante los próximos cinco años, sin votos del bloque "kirchnerista", que abandonó el recinto por considerar que era "un error jurídico" el tratamiento del proyecto respectivo.
La iniciativa prevé, entre otras medidas, la inversión de 300 millones de pesos, un censo de la población ribereña, el traslado y reubicación de esas familias y la formación de una comisión para el Riachuelo, en el marco de su Consejo Asesor Permanente, para seguir la aplicación de la emergencia ambiental.
El texto consensuado que llegó al recinto reunió trabajos de los diputados Juan Manuel Velasco, del ARI; Marcelo Godoy, de Compromiso para el Cambio, y de Diego Kravetz, del Frente para la Victoria (FpV).
Aunque en la reunión de Labor Parlamentaria del miércoles los principales bloques habían acordado debatir "sin discursos", desde el bloque del FPV se cuestionó ese condicionamiento, "porque así parece una dictadura", según Miguel Talento.
Marcelo Godoy, vicepresidente de la comisión de Ecología, fundamentó que "la mayor contaminación que sufre la cuenca es por desechos industriales, aguas cloacales y residuos de vertido clandestino, a lo que se suman 140 basurales".
En el recinto, Helio Rebot (FpV) advirtió: "No podemos instar al Ejecutivo a firmar convenios con otras jurisdicciones que no sabemos si van a estar de acuerdo".
