Los legisladores que concurrieron al encuentro con Bergoglio en la sede del Arzobispado porteño fueron el jefe de la bancada de la UCR en la Cámara alta, el mendocino Ernesto Sanz; el jujeño Gerardo Morales y el pampeano Juan Carlos Marino.

Durante la reunión, que duró 40 minutos, Bergoglio escuchó atentamente a sus interlocutores pero no se pronunció sobre ninguno de los puntos planteados, aunque hizo consideraciones generales sobre la necesidad de "preservar la calidad de las instituciones" y que la separación de poderes "funcione bien".

Al finalizar la reunión, Morales explicó que "hemos planteado que en Jujuy está en marcha un proceso de reforma de la constitución y nuestra preocupación es cuál será el rol de la Iglesia en este tema".

El senador jujeño agregó que "nuestra preocupación es la actitud dual del obispo (Marcelo) Palentini, quien primero dice que está en contra de la reforma de la constitución provincial y de la reelección de Fellner y semanas despues está a favor". Morales continuó sus cuestionamientos al obispo Palentini al indicar que "días después apareció firmando convenios por la realización de obras en iglesias".

El legislador jujeño informó que monseñor Bergoglio "se limitó a escuchar" el planteo, aunque sin emitir ninguna opinión. "Vamos a unirnos a otras fuerzas políticas, tanto en Misiones como en Jujuy, para hacer frente al abuso de poder", finalizó Morales. Agregó que "hemos aprovechado la reunión para hablar de la marcha del país, de algunas preocupaciones nuestras vinculadas con las cuestiones institucionales y no mucho más que eso".

Morales dijo que "Bergoglio nos escuchó, nos recibió muy bien, es una audiencia que pedimos hace quince días. La Iglesia comparte la necesidad de mantener un diálogo institucional".