La entidad ecologista pidió la sanción de la Ley de Bosques.
Activistas de Greenpeace disfrazados de “asesinos con motosierras” reclamaron en el Congreso que se sancione la Ley de Bosques, que declara la emergencia forestal y establece una moratoria a los desmontes, una iniciativa que podría tratarse hoy en el Congreso.
El proyecto de ley establece “la emergencia forestal a nivel nacional” y una “moratoria a los desmontes” que durará mientras las provincias realicen un ordenamiento territorial en sus bosques nativos. La iniciativa busca planificar las actividades forestales agrícolas y ganaderas según criterios ecológicos.
Una decena de activistas de Greenpeace se caracterizaron con la imagen del personaje “Jason” que se hizo conocido con la serie de películas “Martes 13” para reclamar el cese de los desmontes de los últimos bosques nativos “a una tasa que triplica la media mundial”, según informó un comunicado de la organización.
Durante la manifestación, a la que adhirieron la Fundación Vida Silvestre Argentina y la Fundación Ambiente y Recursos Naturales, Greenpeace denunció que en la Argentina se “desmonta un árbol por segundo”.
El diputado Miguel Bonasso avaló el reclamo y sostuvo que el proyecto reclamado por los ambientalistas “es prioritario” para la Comisión de Recursos Naturales y Ambiente Humano, que preside. “Esta ley es imprescindible para el beneficio de las generaciones futuras”, añadió Bonasso, quien se sumó a los reclamos por el urgente tratamiento de la ley.
En tanto, el coordinador de la campaña de Biodiversidad de Greenpeace, Hernán Giardini, advirtió que los desmontes conllevan conflictos sociales “cada vez más frecuentes en el norte del país”.
