El Frente para la Victoria postergaría este miércoles una vez más el tratamiento “en particular”, artículo por artículo, del proyecto de ley que regula la tala de bosques nativos y declara la emergencia forestal en todo el país.

Según anticipó una fuente kirchnerista, el texto podría volver a comisión para esperar un dictamen de la Secretaría de Medio Ambiente o no ingresar en el temario de la sesión.

Cualquiera de estas alternativas congelaría el proyecto -impulsado por el titular de la comisión de Medio Ambiente, el transversal Miguel Bonasso- que hace poco más de dos semanas fue aprobado “en general” pero no avanzó porque existen fuertes resistencias en el kirchnerismo. El rechazo es encabezado por los diputados oficialistas de Misiones, Salta y Formosa y quieren introducir, en su tratamiento artículo por artículo, una serie de reformas que modificarían sustancialmente es espíritu de la ley que establece criterios básicos para la explotación de los recursos naturales

Entre los cambios empujados por los diputados de esas provincias, dónde la tala de bosques avanza sin demora y su intensidad es atacada por organizaciones ambientalistas, se encuentra la posibilidad de que sean las provincias quienes decidan adherir a la “emergencia forestal”. Además, quieren cambiar la obligatoriedad de realizar un estudio de impacto ambiental independiente por una declaración jurada sobre el alcance de la tala.

En ese marco, Greenpeace realizó ayer martes una protesta frente al Congreso para reclamar el tratamiento de la iniciativa y un activista como Papá Noel junto a un arbolito de navidad talado, sin lugar para los regalos. “Lo que se está buscando es el fracaso de la sesión de este miércoles, de ese modo todo pasa al año próximo, que será un año de baja actividad parlamentaria por las elecciones nacionales”, afirmó Juan Carlos Villalonga, director Político de Greenpeace. “Una vez más, vemos cómo el doble discurso y la doble moral son la lógica de la política en la Argentina: mientras el presidente dice que el medio ambiente es una cuestión de Estado, los diputados oficialistas complotan para frenar una ley que busca evitar la pérdida de los últimos bosques nativos argentinos”, agregó.