Desde hace varios meses, venimos reclamado públicamente que las autoridades de PAMI, a nivel nacional, se ocupen de la Regional Rosario. Esto no ha sido escuchado y hoy vemos azorados que, como medida de “Fin de Año”, los empleados de la Delegación Rosario decidieron suspender la entrega y la tramitación de medicamentos hasta el martes 26 de diciembre. Invocan la falta de empleados para atender todas las demandas y la necesidad de implementar un sistema informático operativo para realizar esta tarea…

Lo anterior no merece mayor argumentación.

Sólo insistimos, e insistiremos enfáticamente, para que por una vez se piense en las necesidades de nuestros adultos mayores y que ésta sea la prioridad.

No pueden pensarse políticas de salud si no tenemos en cuenta a quienes van dirigidas y apuntamos todos nuestros esfuerzos para que la dignidad, la justicia, la equidad y la solidaridad sean los valores que guíen a las políticas públicas en nuestro país.

Desde la Cámara de Diputados de la Nación seguimos de cerca el proceso de deterioro y de ruptura de lazos sociales que se ha venido instalando en la Delegación Rosario del PAMI desde hace varios años.

No es suficiente que el director ponga su renuncia a disposición de las autoridades nacionales. Se requiere una respuesta hoy. Ponemos a disposición de las autoridades nacionales, de los trabajadores, de los afiliados y de todos los involucrados en la Obra Social, todo lo que esté a nuestro alcance para resolver, de manera definitiva, los problemas que el PAMI nunca debió tener.

Trabajamos para darle viabilidad a la democracia y esto implica generar estrategias de diálogo que permitan llevar adelante esfuerzos para tener, en un plazo no muy largo, un país que valga la pena. Nuestro compromiso va en este sentido.

* Susana García es diputada nacional del bloque del ARI