El Frente para la Victoria de la Cámara baja se comprometió a discutir en dos semanas el proyecto de ley que establece la protección de los bosques nativos y descomprimió la protesta que iban a realizar militantes de Greenpeace junto con el diputado transversal Miguel Bonasso.

Así lo anunciaron el presidente del bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria y el diputado Miguel Bonasso en el marco de una tensa conferencia de prensa que tuvo lugar en el Salón de Pasos Perdidos.

En ese marco, el titular de la bancada oficialista señaló que “el Gobierno tiene interés de que se apruebe esta ley y por eso la vamos a tratar en la primera sesión. Somos un bloque federal y como tal, hay una visión federal de cada tema, pero pudimos debatir y consensuar para tratar la ley”.

Por su lado, Bonasso denunció “inaceptables presiones” por parte de algunos organismos “como el Consejo Federal de Medio Ambiente”, y de algunos gobernadores “que confunden federalismo con feudalismo”.

“Lo central es que la ley salga y que se paren los desmontes salvajes, ya que lo que perdimos no lo podemos recuperar”, dijo el diputado, quien consideró “un triunfo” que la ley sea tratada en la primera sesión del Cuerpo.

“En 15 trataremos el proyecto”, dijo el titular de la bancada kirchnerista, Agustín Rossi, poco antes de abandonar la conferencia de prensa en el Salón de Pasos Perdidos, donde contradijo a su colega al señalar que “bajo ningún punto de vista mi bloque sufrió las presiones de las que habla Bonasso”.

La paciencia de Rossi llegó al límite cuando Bonasso pidió que la ley, después de ser tratada en Diputados, sea votada en el Senado -donde el kirchnerismo controla el Cuerpo-, y se fue antes de que terminara de hablar.

La iniciativa, impulsada por Bonasso, dispone la suspensión de los desmontes por un año.

Los cambios planteados por los diputados del Frente para la Victoria están relacionados directamente con la eliminación del texto del artículo que establece la “emergencia forestal” en todo el país. Bonasso dijo que podría acceder a ese punto pero se debe mantener los “presupuestos mínimos” mediante los cuales se deberá realizar un reordenamiento territorial para establecer qué bosques pueden talarles y cuales no.

“También deben protegerse a los campesinos con propiedades veinteañales que son empujados fuera de los bosques por las empresas madereras y sojeras. Ellos realizan un uso racional de esos bosques porque tiene otro tipo de relación con la tierra y lo que ella produce”, indicó el diputado kirchnerista.