Varios legisladores nacionales admitieron que el Gobierno central estaba dispuesto a intervenir La Rioja, pero se frenó luego de que sondeos reservados que hizo entre líderes de la oposición parlamentaria le indicara que no iba a conseguir el apoyo necesario para aprobar esa medida.

Según pudo saberse, este miércoles bien temprano la decisión estaba tomada respecto a la intervención de la provincia, habida cuenta de la situación caótica generada por la existencia de dos gobernadores: uno prácticametne autodesignado por la Legislatura que maneja, y el otro atrincherado en su oficina de la Casa de Gobierno.

Así las cosas, hubo sondeos de los que se encargaron el titular del bloque oficialista del Senado, Miguel Angel Pichetto, y el jefe de la Cámara baja, Alberto Balestrini. Efectuada una recorrida preliminar ante los presidentes de las principales bancadas, para verificar si estarían dispuestos a apoyar un proyecto de intervención -debería haberse tratado este mismo miércoles sobre tablas, requiriendo los dos tercios de los votos en cada Cámara-, los resultados no fueron demasiado halagüeños. De por sí, en una reunió convocada en el Senado, para analizar en Labor Parlamentaria el tema, la oposición le aclaró al oficialismo que no daría su aval.

Así las cosas, el tema fue dejado de lado.

Se asegura también que quien por obvias razones se movió activamente en el Congreso fue la hermana del gobernador suspendido, Ada Maza, quien repartió entre sus pares un trabajo elaborado nada menos que por el diputado y constitucionalista del PRO Jorge Vanossi, con argumentos a favor de la intervención que el mazismo pretendía.