La actual presidenta de la comisión Defensa de Consumidores y Usuarios de la Legislatura porteña presentó un proyecto para que se prohíba la venta, expendio o suministro de pegamentos a menores de 18 años de edad.

La normativa incluye a colas o sus similares, que en su composición contengan sustancias derivadas de hidrocarburos, como tolueno, ciclohexano, isobutano, benceno o acetona, y sustancias químicas que provoquen efectos de adicción, alucinógenos y/o alteraciones en el sistema nervioso central.

Según el artículo 2° del proyecto de la diputada Majdalani , los comercios que tendrán que acogerse a la ley serán los siguientes: quioscos, quioscos polirubros, supermercados, almacenes, minimercados y autoservicios, además de la venta ambulante de los mismos. Asimismo, dichos comercios tendrán prohibida la distribución gratuita de adhesivos y/o pegamentos.

Las infracciones a esta ley o a su reglamentación cometidas en el territorio porteño serán sancionadas con las siguientes penas: a) En los casos de venta en lugares no autorizados, se procederá al decomiso de la mercadería y a una multa de 1.500 pesos o arresto de hasta 60 días. b) Quienes realicen distribución gratuita recibirán una multa de 1.500 pesos y se les decomisará la mercadería.

De acuerdo con el proyecto de la legisladora de Juntos por Buenos Aires, podrán vender, expender o realizar suministros de adhesivos y pegamentos a personas mayores de 18 años las pinturerías, droguerías, corralones de materiales, tapicerías, marroquinerías y ferreterías. Para ello, estos comercios deberán confeccionar comprobantes por duplicado, en los que se consignarán: identidad y datos personales del comprador, además del destino del producto adquirido. Los que no cumplan con las prescripciones de la ley recibirán las mismas penas que aquellos comercios que tienen prohibida la venta, expendio o suministro a personas menores de 18 años.

Para la redacción del proyecto, la legisladora porteña tomó como base leyes de ocho provincias (Buenos Aires, Misiones, Santiago del Estero, Córdoba, Chaco, La Pampa, Río Negro y San Juan) y un proyecto de ley de la Defensoría de la Ciudad, presentado a principios de 2003.

En sus fundamentos, Majdalani dijo que “el objetivo de la presente norma es lograr una regulación para nuestra Ciudad que tienda a disminuir las posibilidades que tienen los menores de adquirir estos pegamentos para satisfacer sus adicciones y también para penalizar a aquellos adultos que conciente o inconscientemente cooperan para que estos productos lleguen a manos de esos menores”.

También afirmó: “El tolueno, un solvente que contiene algunos pegamentos, es utilizado como droga alucinógena barata (alrededor de dos pesos por frasco), por los chicos de la calle y los adolescentes de los barrios pobres. Los efectos agudos en los menores que lo inhalan duran entre 30 y 45 minutos. Los niños de la calle lo usan para paliar el hambre y el frío, en muchos casos, o para olvidar las situaciones de maltrato o abandono. La intoxicación se caracteriza por la euforia, excitación, pérdidas de la inhibición, sensación de fuerza y alucinaciones visuales”.

Por último, la diputada Majdalani remarcó: “El consumo crónico trae daños irreversibles al sistema nervioso central, a los riñones y pulmones, pérdida de audición, espasmos en extremidades, daño en la médula espinal, pérdida de la memoria, daño cerebral, posibles efectos en el feto y hasta potencial muerte súbita”.