El candidato presidencial Roberto Lavagna y autoridades de la UCR firmaron un “acta de intención” para la conformación de una coalición electoral, que deberá ser refrendada ahora por la Convención Nacional del radicalismo.

El encuentro tuvo lugar en el Congreso de la Nación, y al finalizar el mismo, el ex ministro destacó que lo que se intenta es construir “una alternativa progresista superadora” con vistas a los próximos comicios.

En referencia a su acuerdo con el radicalismo, Lavagna aclaró que el mismo “cierra un ciclo histórico”, y recordó que “hubo intentos de acercamiento electorales en los años 40 y 70, pero hubo circunstancias que no los permitieron, aunque pareciera que hoy si lo permiten”, indicó.

Lavagna afirmó que la coalición que impulsa “no es un proyecto mezquino”, y no busca únicamente hacer oposición, sino que trata de “proteger las cosas que ha hecho bien” el Gobierno, entre las que mencionó “el programa económico”, y corregir “las que se están haciendo muy mal, principalmente en el área de energía, y otras que no se hicieron, que tienen que ver con la calidad de las instituciones”. Dijo luego que le resulta “indiferente” competir en las próximas elecciones contra el presidente Néstor Kirchner o contra su esposa, la senadora Cristina Fernández, y sostuvo que lo que encabezará es una “alternativa superadora progresista” a este gobierno.

En declaraciones formuladas luego de la reunión que mantuvo con las autoridades de los bloques de diputados y senadores radicales, Lavagna descartó luego que los recientes éxitos electorales del oficialismo en las provincias de Catamarca y Entre Ríos sean un preanuncio de lo que podría ocurrir en los comicios presidenciales de octubre próximo.

Al respecto, remarcó que “las elecciones han sido separadas para dar lugar a los temas de carácter local, y en consecuencia no se deben extrapolar falsamente al ámbito nacional”.

Lavagna destacó que desde hace varios meses, “y particularmente después del triunfo de la oposición en Misiones, hubo un trabajo legislativo en común, incluyendo a otros partidos, y la intención es continuar con una agenda legislativa común”.

Al respecto, indicó que en el encuentro se analizó un proyecto de ley de su autoría que envió al Congreso cuando era ministro, para eximir a las pymes del pago del impuesto a las Ganancias. que se encuentra trabado en la Cámara alta por el oficialismo desde que dejó el Gobierno y se pasó a la oposición.

“En el caso del radicalismo y el justicialismo, es casi cerrar un ciclo histórico porque, como se sabe, hubo intentos de acercamiento electoral entre ambos partidos en los años 40 y 70, Pero las circunstancias luego no lo permitieron”, expresó Lavagna. “Hoy, las circunstancias lo permiten”, dijo Lavagna al retirarse de las oficinas del bloque radical en el Senado de la Nación.

El ex ministro sostuvo, además, que el acuerdo es una “alternativa superadora centro-progresista”, pero también aprovechó para señalar que en la reunión también se habló sobre un proyecto de ley impulsado por él cuando estaba en el gobierno para eximir de impuestos a las Pequeñas y Medianas Empresas.

Ese expediente fue aprobado en la Cámara de Diputados, pero quedó sin tratarse en el Senado, por lo que los senadores radicales se comprometieron a impulsar su discusión para que sea convertido en ley durante los próximos meses.

En una conferencia de prensa, Lavagna sostuvo que su proyecto de gobierno “no es mezquino” ni “pretende volver atrás”, y remarcó que “hay que proteger las cosas que se hicieron bien, como en la economía; corregir las que se hicieron mal, como en el sector energético; y hacer las que no se hicieron, como proteger las instituciones”.

En el marco de la convención radical que tendrá lugar este viernes a partir de las 17 en Avellaneda, la conducción de la UCR buscará aprobar la coalición electoral con el ex ministro, el programa de gobierno conjunto y la inclusión en la Carta Orgánica de un dictamen que consolide las facultades de intervención del Comité Nacional sobre los distritos “rebeldes”.

Si bien en la Convención Nacional de agosto de 2006 se facultó a la conducción a intervenir los distritos que no sigan una línea opositora al Gobierno nacional, esa atribución nunca fue incluida en la Carta Orgánica, uno de los motivos por los cuales el Comité Nacional sufrió un reciente revés judicial en su intento de intervenir el partido radical de Mendoza. Además, se prevé que la Convención faculte a la mesa directiva del partido a avanzar en las negociaciones con Lavagna para cerrar la fórmula electoral con un candidato a vicepresidente radical, cargo para el que son mencionados el jefe del bloque de senadores radicales, Ernesto Sanz, y el diputado Federico Storani.