“La desaparición y muerte de Rodolfo Walsh, como la de los miles de desaparecidos y muertos durante la etapa más negra de nuestra historia, mantiene vivo el reclamo de Justicia “, dijo Miguel Talento, vicepresidente segundo de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

En este sentido, el legislador porteño agregó que “el legado más importante del periodista y escritor es su ejemplo de militancia y lucidez intelectual que nunca traicionó, en su compromiso de dar testimonio en momentos difíciles, tal como lo escribió al final de su Carta Abierta a la Junta Militar “.

Para Talento, “hoy, tres décadas después de su asesinato, su obra y su figura son fundamentales como un ejemplo a imitar y a continuar “. Aseveró también que ” la defensa de los oprimidos y la reivindicación de las luchas y causas de los pueblos latinoamericanos que pregonó Rodolfo Walsh, sirvan hoy para reflexionar acerca de los valores y las acciones que nos permitan, sobre la base del respeto por las normas democráticas, el desarrollo y la consolidación de herramientas políticas populares”.

El 25 de marzo de 1977, un grupo de tareas emboscó a Walsh en las calles San Juan y Entre Ríos, en la Ciudad de Buenos Aires, con el objeto de detenerlo. Al ser descubierto, el periodista se resistió y fue herido de muerte. Su cuerpo nunca apareció y su biblioteca personal en el Tigre fue saqueada con innumerables escritos inéditos.