El diputado Carlos Araujo presentó un proyecto de resolución, para que el Gobierno Porteño informe a la legislatura, sobre la actual situación en que se encuentra el servicio de transporte subterráneo de la ciudad de Buenos Aires.

Araujo expresó que “mientras los funcionarios hablan continuamente del tema sin que se adopten medidas concretas, se viene registrando desde hace meses un deterioro en la frecuencia de circulación de los convoyes de trenes subterráneos de le Línea D, Catedral-Congreso de Tucumán, deterioro que se hace sentir con particular intensidad en los horarios pico de 8.30 a 9.30 y de 18 a 19.30 horas”.

“Los trenes circulan con frecuencias de entre cinco y seis minutos entre formaciones y los pasajeros colman los andenes sin lograr acceder a las formaciones que, provenientes de Congreso de Tucumán se dirigen hacia el centro de la ciudad y a la altura de la estación Plaza Italia ya se encuentran colmadas”, agregó.

Por otra parte el jefe del bloque Recrear se preguntó “si esta situación es de conocimiento de las autoridades responsables, si se realiza control en la frecuencia de prestación del servicio y, finalmente, a que causa se deben estas restricciones y qué medidas se contemplan para superarlas”.

“Tenemos presente que durante el pasado verano se mencionó incesantemente a través de la prensa que la reducción en las frecuencias se debía a las conocidas restricciones en el suministro energético, pero también podría deberse, en el caso presente, a baja disponibilidad de material rodante a consecuencia de restricciones en la inversión. Todo indica que, de no lograrse rápidas mejoras en la calidad y volumen de la oferta de servicios de trasporte público, el tránsito de superficie en nuestra Ciudad se encaminará hacia un colapso de graves consecuencias”, finalizó Araujo sus declaraciones.