Detallamos cómo quedaron las cosas luego de los comicios provinciales del último domingo.
El gobernador Miguel Saiz logró la reelección por otros cuatro años y ya piensa no sólo en lograr que un radical se cuelgue de la fórmula presidencial kirchnerista, sino también en una eventual candidatura personal para los primeros niveles en 2011. Pero lo cierto es que de momento tiene por delante cuatro años en su provincia, Río Negro, donde el radicalismo no tendrá mayoría en el Parlamento provincial. Lo cual no es poca cosa, por cierto.
El Frente para la Victoria será a partir de diciembre la primera minoría de la Legislatura unicameral rionegrina, con los 21 integrantes sobre un total de 43 bancas con que cuenta el Cuerpo.
Según informaciones provenientes del Sur, el conglomerado político formado por el PJ, el Frente Grande y el partido Sur de Bariloche consiguió 9 bancas de la lista sábana y otras 12 por los circuitos.
A su vez, la oficialista alianza Concertación para el Desarrollo alcanzó un total de 19 escaños, 7 de la sábana y otros 12 por circuitos.
El partido Provincial Rionegrino aportó treinta mil votos para el triunfo de la fórmula Miguel Saiz-Bautista Mendioroz, pero presentó lista propia de candidatos legislativos y accedió a dos bancas de representación poblacional.
La cuarta fuerza política de la provincia, el ARI, logró un escaño, también de la llamada lista sábana.
Cómo habían resultado las cosas en 2003, como para comparar un cuadro y otro. Entonces, el radicalismo obtuvo 24 representantes, mientras que el justicialismo alcanzó nueve, divididos después en dos sub-bloques.
En declaraciones a la prensa, el gobernador Saiz expresó que “por la actual legislatura pasaron muchas iniciativas, la mayoría de ellas creo, que han sido aprobadas con voto unánime de todos los bloques, por encima de las diferencias de puntos de vista partidarios”.
