El senador Ernesto Sanz admitió la vigencia de aspectos positivos de la primera etapa de la gestión de Néstor Kirchner, pero se quejó porque en los últimos dos años se produjo un deterioro, que atribuyó a un afán del jefe de Estado por construir “un modelo de construcción de poder político y económico”.

Para Sanz, los cuatro años de Kirchner como presidente “se pueden dividir en dos y dos; los primeros, mucho mejores que los segundos”.

Por su parte, el senador renovador salteño Ricardo Gómez Diez consideró que el Gobierno será juzgado en el futuro por no haber aprovechado “el momento excepcional para la Argentina que brinda el contexto internacional” y lo atribuyó a “una falta de políticas de mediano y largo plazo” en temas fundamentales, como “infraestructura y obras públicas”.

En tren de criticar al kirchnerismo gobernante, el senador renovador dijo que “en los últimos cuatro años se produjo un deterioro de las instituciones”.

A su vez, la justicialista crítica Hilda “Chiche” González de Duhalde dijo que el país vive en estado de convulsión social y consideró que ello se debe a que “el Presidente no ejerce la autoridad ni el orden bien entendidos”.

En declaraciones radiales, Chiche Duhalde dijo que “Kirchner no sabe dialogar, no sabe generar consensos y se aprovecha del temor que despierta en algunos para terminar haciendo lo que le parece a él”.

En tal sentido sostuvo que “no se ha puesto orden al crecimiento para que ese crecimiento se sostenga cuando dejemos de ir con viento de cola” y advirtió que el Presidente “pretende manejar un país como si estuviera manejando Santa Cruz, que es una comarca”.