Se trata de un proyecto tratado en el Senado para agilizar los trámites.
Una iniciativa para modificar el Código Civil con el objeto de agilizar los juicios de divorcio cuando hay acuerdo entre las partes no logró dictamen favorable en la Comisión de Legislación General del Senado.
La intención del presidente de la Comisión, el kirchnerista Nicolás Fernández, era que el proyecto estuviera listo para llegar al recinto la próxima semana, pero la justicialista puntana Liliana Negre de Alonso frenó el tema, aduciendo que no había tenido la oportunidad de estudiar el expediente, aunque también adelantó que no estaba de acuerdo con el proyecto porque consideró que “convierte al matrimonio en un mero acto administrativo”.
Al expresar su oposición, Negre de Alonso sostuvo que “la familia es una institución fundamental de la sociedad”, y que se deben hacer todos los esfuerzos para preservarla.
“El matrimonio no es un simple trámite administrativo, en el que se pasa por el Registro Civil para firmar y listo. Tenemos que trabajar para fortalecer la familia”, remarcó la legisladora, que en estos temas suele representar las posiciones de la Iglesia.
El proyecto contó en cambio con el apoyo de los restantes senadores presentes en la reunión de comisión, Nicolás Fernández, Isabel Viudes, Sonia Escudero y Carlos Rossi.
De todos modos, como Negre de Alonso manifestó que no estaba enterada de que se iba a tratar este tema, se decidió pasar a un cuarto intermedio para estudiar más a fondo el proyecto, el cual se presume que contará con dictamen favorable.
La norma fue aprobada por abrumadora mayoría en la Cámara de Diputados a fines de marzo y si el Senado lo aprueba sin modificaciones, será convertido en ley durante las próximas semanas.
La obligación de los magistrados de convocar a una audiencia de conciliación está contenida en el artículo 236 del Código Civil, pero al momento de impulsar el proyecto se consideró que los jueces “no están preparados profesionalmente para superar desaveniencias conyugales”.
Otro de los cuestionamientos al respecto es que muchas veces el juez tiene la obligación de preguntar a las partes si quieren seguir juntos, pese a que en muchos casos quienes iniciaron el trámite de divorcio ya armaron nuevas familias.
Cuando el proyecto sea norma, las parejas que tramiten su divorcio no deberán comparecer obligatoriamente ante el magistrado en una segunda audiencia, que ya no se realizará, para fundar los motivos de sus deseos de separación y el juez entonces resolverá la separación legal.
