Para evitar los varios pedidos de interpelación a ministros del Gobierno nacional, el oficialismo no dio quórum en la Cámara baja. Entre los temas que no se trataron figuraba la tipificación de la desaparición forzada. La oposición reclamó la presencia del kirchnerismo con aplausos.
En la Cámara baja no nevó, pero la sesión quedó congelada por un mecanismo legislativo tan reglamentario como cuestionable: no dar quórum.
El oficialismo imaginaba que la oposición apuntaría con todas sus armas contra el Gobierno nacional por la crisis energética, la autonomía de la Ciudad y los supuestos casos de corrupción de sus funcionarias Felisa Miceli y Romina Picolotti.
Si bien no había grandes temas de debate en la labor parlamentaria, la sesión sería “un espacio político para hacerle el juego a la oposición para que dispare contra el Gobierno”, aseguraron fuentes parlamentarias oficialistas.
“Que den quórum ellos y luego nosotros bajamos”, dispararon desde el oficialismo en tono jocoso. Sin embargo, los números parlamentarios marcan una obviedad, ya que la oposición por si sola no puede dar el número suficiente para comenzar la sesión.
El timbre que llama a los diputados al recinto comenzó a sonar a las 15 pero a las 17:40 sólo había 45 legisladores presentes y 212 ausentes. Pero, paradójicamente, a ese momento, había más diputados oficialistas que de la oposición.
A las 18:12, la oposición reclamó la presencia del kirchnerismo con aplausos, a pesar que su titular Agustín Rossi y los principales referente del oficialismo se encontraban presente, pero había 183 ausentes. Siendo a las 18:38 se leventó la sesión.
Entre los temas que han quedado sin tratamiento se encontraban tipificar el delito de desaparición forzada es impulsado por la kirchnerista por Entre Ríos, Rosario Romero; dos proyectos de reforma de contrato de trabajo; modificación de la ley de Pymes; penalización de acciones que afecten la seguridad del tránsito, modificando el Código Penal; y una modificación sobre el Código Aduanero sobre la importación de mercadería falsificada.
La figura política del día fue el candidato a presidente Ricardo López Murphy, quien estuvo en el Congreso porque iba a asumir el diputado reemplazante de Mauricio Macri, Julián Obiglio, pero se fue sin poder cumplir su cometido.
Diputados no sesionó y se sumó al ahorro de energía que propone el Gobierno.
