En vísperas de que el plenario del Consejo de la Magistratura se reúna para tratar el pedido de juicio político en su contra, el juez en lo penal económico Guillermo Tiscornia envió una carta a los integrantes de ese organismo.

La misiva incluye duras críticas y advierte que las medidas que allí podrían llegar a adoptarse en su contra tendrían que ver con un amparo judicial que él presentó por haber sido excluido de un concurso para asumir como integrante de un tribunal oral.

Pero la principal destinataria de sus críticas es la diputada kirchnerista Diana Conti, presidenta de la Comisión de Acusación, a quien le endilga haber omitido “el deber moral de excusarse de conocer en tales trámites por cuanto se desempeñó como letrada que asistió a mi señor padre, Agustín Tiscornia, ante la Comisión Interamericana sobre Derechos Humanos hace casi veinte años”.

Tiscornia alude a una causa en la que el padre de Tiscornia fue procesado por estafas en 1968, y tras acudir al organismo internacional con el asesoramiento de Conti logró ser desvinculado de la causa. “Ahora la consejera olvida su antiguo rol de abogada de Agustín Tiscornia ante el foro judicial internacional; al contrario lo enloda, lo insulta, lo agravia y lo tilda de corrupto, cuando -otrora- defendía su honorabilidad en ese mismo foro internacional”, recordó el magistrado.

Este juez investiga además a la ministra de Defensa, Nilda Garré, por presunto contrabando agravado, y precisamente este martes la citó a declaración indagatoria.

Por otro lado, Tiscornia indicó que la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal le dio la razón al aceptarlo como querellante en contra de quienes lo tildaron de coimero.