La Legislatura porteña estarìa dispuesta a aprobarlo. El proyecto pertenece a dos legisladoreas kirhcneristas. Escribe la diputada Ana Suppa.
La Legislatura contempla la posibilidad de tratar la ley que crea el Laboratorio Estatal de Producción de Medicamentos de la ciudad de Buenos Aires.
En este sentido, la vicepresidenta de la Comisión de Salud, la diputada kirchnerista Ana Suppa subrayó que “la Ciudad debe garantizar el acceso a los medicamentos de toda la población” y manifestó su “preocupación por la actitud obstruccionista del macrismo en este tema, que siempre se mostró reacio a su creación y ahora pretende erigir un laboratorio limitado a la fabricación de las llamadas drogas huérfanas”. Es decir, aquellas que los privados no comercializan por su escasa rentabilidad, descartando lo que para el Frente para la Victoria porteño es prioritario: que “desde el sistema estatal se elaboren algunas drogas básicas a bajo costo, que eventualmente puedan neutralizar las maniobras oligopólicas que reiteradamente el gobierno porteño enfrenta en ocasión de licitar medicamentos”.
Suppa, impulsora de esta ley junto a su par de bancada Beatriz Baltroc, expresó además que “a esta preocupación se suma la pretensión del Ministerio de Salud de la Ciudad de recortar la partida de $ 800.000 que se habían asignado a este laboratorio”.
Consideraciones generales sobre el proyecto
*por Ana Suppa
La Ley de Creación del Laboratorio Estatal de Producción de Medicamentos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires constituye una herramienta fundamental para garantizar el acceso gratuito y universal a la salud.
La creación del Laboratorio Estatal adquiere especial relevancia si tenemos en cuenta que el subsector estatal de atención de la salud de nuestra Ciudad es el de mayor uso de medicamentos de la Argentina, con una cobertura que no sólo utilizan los porteños sino también las y los habitantes del gran Buenos Aires, del interior y hasta del exterior del país.
Esta Ley, fruto del consenso alcanzado dentro de la Comisión de Salud de la Legislatura entre las iniciativas que en tal sentido presentamos la diputada Beatriz Baltroc y quien les escribe, no apunta a competir con el sector privado sino a asegurar el derecho básico a disponer de las drogas esenciales que necesitan para el cuidado y protección de la salud los sectores más desprotegidos de nuestra comunidad.
El futuro Laboratorio Estatal –dotado de un área técnica y un área administrativa- podrá además cumplir un rol fundamental como proveedor de fármacos necesarios para el tratamiento de enfermedades desatendidas por la actividad privada por su escaso interés comercial, responder eficazmente frente a una situación de demanda insatisfecha o ante cualquier emergencia que pudiera plantearse.
Sin duda, tendrá una función decisiva frente a eventuales casos de desabastecimiento, al obrar como un regulador de la oferta que desalentará la formación de monopolios. No olvidemos que en reiteradas ocasiones nuestro Ejecutivo hizo llamados a licitaciones para la compra de medicamentos que debió declarar desiertas por ausencia de oferentes, viéndose obligado a salir al mercado para adquirirlos directamente y a precios regulados por este último, bajo la sospecha de hallarse frente a una maniobra monopólica.
Para poner en marcha al futuro Laboratorio Estatal la Ciudad ya cuenta con las instalaciones y la experiencia acumulada por el Taller Protegido N° 4 dependiente de Salud Mental, y dispone de personal, aparatos y equipos que satisfacen los estándares de fabricación y control de calidad produciéndose hoy un promedio de 500 mil comprimidos mensuales, correspondientes a pequeños lotes de distintos productos utilizados en el tratamiento de la tuberculosis y de afecciones psiquiátricas, que son consumidos dentro de la red sanitaria porteña.
El perfeccionamiento de los controles de calidad y de las metodologías de fármaco-vigilancia de conformidad a los parámetros exigidos por la ANMAT, unido a la diversificación e incremento de los genéricos producidos actualmente por el laboratorio y al aumento de su infraestructura humana y material, convertirán a éste en un Laboratorio Estatal de Producción de Medicamentos que cumplirá un rol fundamental en la distribución eficiente, racional y equitativa de las drogas básicas que requiere nuestra población.
Por otra parte los Talleres Protegidos, con su programa de reinserción psico-socio-laboral de personas con sufrimiento psíquico, tienen su continuidad garantizada.
