La senadora Fernández de Kirchner apareció el último martes haciendo campaña junto a su esposo en Formosa, respaldando de paso la candidatura del mandatario de aquella provincia.

Sucede que Gildo Insfrán, un aliado reconocido, no sólo va por la reelección, sino que lo hace por tercera vez. Esto es, de ganar en octubre, Insfrán se encaminará a mandar en su provincia durante 16 años consecutivos.

A juicio del presidente del radicalismo, lo que hizo el matrimonio Kirchner al apoyar calurosamente a Insfrán no es más que demostrar que “el modelo nacional expresado por Néstor Kirchner y su esposa, está en Formosa con Gildo Insfrán”.

Al respecto destacó el “contrasentido” de que la candidata presidencial hablara de calidad institucional “mientras levantaba la mano a Insfrán, que va por el cuarto mandato”.

“Esta es otra muestra de la hipocresía que tiene el kirchnerismo”, destacó el senador jujeño, quien es compañero de fórmula de Roberto Lavagna. Agregó que “la esposa del Presidente, en el Senado fue la abanderada de la ley de Superpoderes, destruyó la facultad de control del Congreso e impulsó la modificación del Consejo de la Magistratura, que tiene más de 100 designaciones de jueces trabadas”.